viernes, 28 de octubre de 2011

LA CHACHA Y EL NIÑO PIJO

Los partidos políticos aprovechan las campañas electorales para propagar su ideología, por lo que los socialistas se han servido ya de la que ahora arranca para adoctrinar a los votantes en la conveniente inevitabilidad de estructurarlos como sociedad de replicantes clónicos.
Si todavía no lo han hecho, fíjense bien en el tufo marxista del mensaje determinista del vídeo que interpretan la uniformada chacha proletaria y el remilgado adefesio a su cuidado, que ya se insinúa como explotador capitalista.
Hasta para los más ingenuos, los socialistas proponen como axioma que los ricos descienden de padres ricos y los pobres de padres pobres.
Puede que eso sea cierto y puede que no lo sea.
En el primer caso, ¿para qué alientan falsas esperanzas en los desfavorecidos por la fortuna, instándolos a que se líen la manta a la cabeza en una lucha de clases inútil, si el encasillamiento social viene predeterminado por el de los progenitores?
En caso de que el mensaje socialista sea una falacia, sus consecuencias serían todavía más preocupantes:
Los hijos de padres proletarios que consigan ascender peldaños en la escala social y económica y los hijos de ricos que hayan descendido en esa escala podrían dudar si sus progenitores reales son los que figuran como tales en sus partidas de nacimiento.
Un hijo oficial de proletario que ascendiera en la escala social hasta alcanzar el bienestar de empresario podría sospechar que su verdadero padre no fue el obrero que figura en su partida de nacimiento, sino el patrón que lo empleaba.
Y el hijo oficial de padre rico que en su edad adulta se quedara sin un duro, ¿no podría sospechar que su nacimiento se debió a un desliz de su madre con alguno de sus criados?
Los socialistas se deberían dejar de coñas, retirar el vídeo de la criada y el niño pijo a su cuidado y dedicarse a trabajar como peones camineros (a las órdenes, y sin discutir de un ingeniero de caminos), y a cobrar subvenciones, que es para lo que, según su mensaje electoral proclama, están programados por un destino ineludible.

jueves, 13 de octubre de 2011

DURAN LLEIDA, PALESTINOS, ANDALUCES Y LA LIBERTAD

Quienes nos habíamos resignado a admitir el triunfo del principio de igualdad sobre el de libertad detectamos síntomas que nos permiten confiar en que no se ha perdido todo todavía.
Son solo chisporroteos esporádicos aunque evidencian que la libertad, generadora de la diversidad individual, aún no ha sido apagada por la igualdad, empeñada en que todos los hombres sean modelos idénticos de un prototipo trucado.
Puede que lo que los optimistas consideremos indicios de algo en lo que confiamos sea solo el reflejo imaginado de un palmeral y no se concrete en el oasis deseado, pero la ilusión ayuda a seguir caminando.
Indicios recientes de que no todos somos iguales:
a) Israelíes y palestinos han acordado intercambiar prisioneros: mil y pico palestinos por un israelí.
b) Se ha organizado un alboroto tremebundo porque el político catalán Josep Antoni Duran Lleida ha dicho que los que cobran el PER en Andalucía se lo gastan en las tabernas.
Lo primero evidencia que un palestino es diferente de un israelí puesto que en una operación de intercambio ha quedado fijado que el valor de un palestino es menos de la milésima parte del de un israelí.
Lo que ha dicho Durán Lleida es igual o muy parecido a lo que sostienen en sus conversaciones desde hace años los propios andaluces.
Uno de los más conspicuos andaluces, Don Felipe González, a los pocos meses de enfrentarse a las responsabilidades de Presidente del Gobierno, enumeró la lucha contra el cobro fraudulento del paro en Andalucía y Extremadura como uno de los retos de su gobierno.
Eso debió ser en la primavera de 1984, en el Palacio de la Moncloa, durante la conversación con un grupo de directivos de la agencia efe –entre los que figuraba éste servidor de ustedes--que lo visitaban para hacerle entrega de una cosa absurda que se llamaba “Teletipo rojo”.
Son dos muestras de que la libertad no ha sucumbido todavía al imperio de la igualdad porque, si todos somos iguales, ¿por qué no se cambian mil palestinos por mil israelíes?.
Y, si en conversaciones entre ellos los andaluces admiten que lo del PER es un fraude, ¿por qué se irritan si eso mismo lo dice un no andaluz, aunque sea catalán?.

viernes, 7 de octubre de 2011

ANDALUCIA Y MADRID: CONTROVERSIA SOBRE LA ENSEÑANZA

Aunque el objetivo de la enseñanza debería ser espolear la curiosidad y guiar al alumno para que descubra lo que quiere saber, su fracaso se calibra en el porcentaje de estudiantes que abandonan sin completar el ciclo académico en que estén matriculados.
Es un recurso meramente estadístico para medir el acierto político de los gestores del sistema educativo, sin tener en cuenta la satisfacción del estudiante por lo que ha aprendido ni la idoneidad del conocimiento teórico adquirido para desenvolverse en el mundo real que lo espera fuera de las aulas.
El sistema de enseñanza, como está montado, se mide por la proporción de alumnos que consiguen el título académico al que aspiren. Su fracaso, por los que desisten de obtenerlo.
Es también otra herramienta estadística—la cantidad que se invierte por alumno—la que usan los burócratas políticos y sindicales de la enseñanza para valorar el sistema educativo.
A mayor inversión por alumno, enseñanza de mayor calidad.
La realidad desmiente ese axioma.
Desde finales del verano, coincidiendo con el arranque de la inminente campaña electoral, la aportación pública al sistema educativo la están presentando los burócratas de la enseñanza como piedra de toque para inclinar el voto hacia sus mentores del Partido Socialista y disuadir a los electores de que se inclinen por el Partido Popular.
Andalucía, el feudo que todavía queda a los socialistas, es para los burócratas de la enseñanza el ejemplo a imitar. Madrid, donde el Partido Popular prepondera, es ejemplo de gestión pública de la enseñanza que debería evitarse por todos los medios.
Datos de un estudio de de Juan M. Lacasa en Magisnet, órgano del magisterio, con datos del ministerio de educación:
Fracaso escolar en Andalucía, 34 por ciento (34 alumnos de cada cien abandonan el ciclo en que están matriculados antes de obtener el título acreditativo)
Fracaso escolar en Madrid: 29 por ciento.
Inversión por alumno, según estudio en el mismo órgano informativo firmado por Adrián Arcos: Andalucía, 3.988,76 euros por alumno/ Madrid, 3.875,82 euros por alumno.
El abandono antes de acabar el ciclo en que el alumno esté matriculado es un baremo tan arbitrario para calificar de éxito o fracaso el sistema educativo como el del gasto por alumno: lo demuestra que Andalucía, gaste casi cien euros más que Madrid y el abandono es cinco puntos porcentuales más elevado.
Está claro que a mayor asignación por alumno no corresponde necesariamente una educación de mejor calidad.
Hay una duda razonable basada en el desvío de fondos para otros fines que los presupuestados: ¿todo el dinero asignado a gastos educativos se destina a la enseñanza?
Es posible también que la evanescencia del carácter derivada de ameno clima andaluz, en contraste con el hosco entorno ambiental de los madrileños, empuje a los primeros a la sensualidad del ocio y a los segundos los comprima en el rigor conceptual del aprendizaje teórico.
Puede que la disciplina académica sea más estricta en Madrid que en Andalucía o, a lo mejor, la actividad docente de los enseñantes de Madrid encuentran menos amparo en los burócratas políticos y sindicales para justificar su ineficacia.

jueves, 6 de octubre de 2011

DE LA SENTADA ANTE LA BANDERA YANKY A ROTA

El sátrapa norcoreano o el iluminado ayatollah iraní que decida arrasar la corrupta civilización occidental desconoce todavía si se atreverá a iniciar la última y definitiva guerra.
Lo que se sabe desde la mañana del seis de octubre de 2011 es que, un cuarto de hora después de que misiles norcoreanos o iraníes despeguen (si lo llegan a hacer) para inutilizar los satélites espías enemigos, una segunda andanada tendrá como objetivo la destrucción de la base de Rota, en España.
Las cuatro fragatas norteamericanas que Zapatero ha anunciado que tendrán su base en Rota (pagando, ha aclarado su vicepresidente Chaves), serán el componente móvil del escudo antimisiles que la OTAN y los Estados Unidos desplegarán ante una hipotética y remota agresión de Corea o Irán, los por ahora, únicos enemigos previsibles de lo que era el Mundo Libre, hasta la caída del añorado Muro de Berlín..
Podría tratarse de un simple juego de guerra necesario para justificar e incrementar la apabullante inversión del “complejo militar-industrial” norteamericano que denunció Eisenhower, o de la respuesta a una amenaza contra Estados Unidos.
En cualquier caso es un paso decisivo en la escalada de inversiones y gastos militares en que el gobierno norteamericano se ha empeñado en arrastrar a sus aliados.
Respuesta a una amenaza o pretexto para incrementar el gasto militar, el escudo antimisiles ya ha llegado a Rota, donde la muerte de la Gorgona Medusa por parte de Hércules, desencadenó una guerra civil mítica que dividió el Olimpo y que todavía perdura.
Lo de la base móvil del escudo antimisiles de Rota también cierra, aunque eso sea solo anecdótico, la evolución hasta el realismo de un osado José Luis Rodríguez Zapatero que comenzó quedándose sentado al paso de la bandera de los Estados Unidos y ha terminado como fiel infantería en todas las aventuras bélicas inspiradas por el gobierno de Washington.

viernes, 16 de septiembre de 2011

EL ESTADO Y EL BUITRE DE UNAMUNO

El gobierno ha violado su neutralidad al restablecer el impuesto sobre el patrimonio, como uno de los candidatos exigía.
Mal está, mitigue o no el desbarajuste económico que el inspirador de la medida ayudó a provocar cuando gobernaba.
Lo peor es que lo que el gobierno saque con éste nuevo impuesto cebará todavía más a la burocracia estatal y agravará la anemia de la sociedad a la que está parasitando.
La alarma creciente de quiebra evoca la sombría mirada del buitre voraz de ceño torvo del soneto de Unamuno, cuando el grajo-estado traga el último despojo de la sociedad para saciar el hambre atroz que nunca se le apaga.
La glotonería es la enfermedad terminal de éste estado, refundación del que se consumió con la desaparición del que su fundador se había hecho a medida en el fragor de una guerra civil, que acabó con el que había nacido cuando, inopinadamente, unas elecciones municipales acabaron con siglos de monarquía.
La que viene no será la primera refundación del Estado en España y, afortunadamente, nada hace temer que haya que reedificarlo sobre las ruinas de un conflicto armado, como cuando la guerra de sucesión, la de la independencia, la de Cuba, las carlistas o la civil.
El que viene debería ser, en contraste con el actual, un Estado que devuelva la iniciativa a la población, renuncie a dirigirla y cambiarla y recaude impuestos de los ciudadanos para garantizarles su seguridad personal y frente a agresiones exteriores.
La mejor receta es reducir a esos dos fines la recaudación de impuestos.
La indolencia individual ha dado como resultado la renuncia colectiva de los españoles a asumir sus obligaciones y derechos como personas.
A pesar de esa dejación, los padres saben mejor que el Estado la educación que quieren para sus hijos y a los hijos les importa más que al Estado el bienestar de sus padres en la vejez.

viernes, 22 de julio de 2011

EL GOBIERNO AYUDA A LOS BANCOS CONTRA LOS AHORRADORES Y LOS QUE PIDEN CREDITOS

Pagan no más del tres por ciento por el dinero que se les comfia y cobran no menos del diez por ciento por lo que prestan a los que, a duras penas, logran que les concedan un crédito.
Son los bancos que, si no se han aprovechado de la crisis que contribuyeron a provocar, no han sufrido por ella más que una reducción marginal de sus beneficios.
Culpan los Bancos al decreto del gobierno que limita desde el primero de Julio el tope de retribuciones que las entidades dedicadas a captar y prestar dinero pueden pagar a los ahorradores, con penalizaciones si los exceden.
Y llevan razón pero no es menos cierto que una diferencia de siete puntos entre el porcentaje que pagan y el que cobran por dinero ajeno los beneficia de manera abusiva.
El gobierno puede aducir como justificación de su decreto la conveniencia de incentivar la actividad de la economía penalizando la seguridad del beneficio de los ahorradores sin el riesgo de invertir en actividades sujetas a los vaivenes del mercado.
Y puede que lleven razón pero esa medida es, por lo menos ineficaz e injusta si no se acompaña de una limitación a los topes máximos del interés que las empresas crediticias exigen a quienes obtienen de ellas créditos de capital ,obtenidos con limitación de remuneración fijada por el gobierno.
Si el gobierno, como ha hecho, limita el porcentaje máximo que los bancos pueden pagar a los ahorradores de los que obtienen capital, pero los dejan en libertad de fijar los topes al interés al que lo prestan, sirven a los menos (las entidades de crédito) en perjuicio de los más (los ahorradores).
Penalizan así a los más desfavorecidos, para beneficiar a quienes cobran intereses usurarios, a los bancos.
Si el gobierno se entromete en las reglas de la oferta y la demanda que regulan el mercado del dinero, que por lo menos lo haga imparcialmente, fijando topes equivalentes para quienes confíen sus ahorros a los bancos y para quienes recurran a los bancos para obtener los créditos que necesiten.
Lo que ahora ha hecho el gobierno con el decreto vigente desde el primero de Julio ha sido perjudicar a los que menos tienen para favorecer a los que tienen más. Y dice que es un Gobierno Democrático.

lunes, 18 de julio de 2011

¿POR QUÉ NO CONTRATAMOS POLITICOS INGLESES PARA ESPAÑA?

No es solo porque no los entendamos por lo que los extranjeros nos parezcan raros a los españoles, sino porque no le encontramos lógica a algunas de sus costumbres.
La superpoblación en sus islas puede explicar que los japoneses vayan siempre de mil quinientos en mil quinientos, ver que todos los personajes de sus películas se sirvan un latigazo al entrar en sus casas explicaría que los Yankees le tengan la afición que le tienen al alcohol.
Hay tanto sicólogo argentino porque necesitan comprender cómo han conseguido arruinar un país tan rico, y el machismo mexicano explica que digan que es “padre” lo que es bueno y que hacerle la puñeta a alguien sea “darle en la madre”.
Pero lo que es incomprensible para un español es esa afición que los ingleses tienen a dimitir.
Por más que uno se estruje los mendrugos húmedos de la sesera no comprende esa manía británica ¿dimitir por permitir que la policía a tus órdenes espíe, si lo normal es que te cesen si no facilitas el espionaje?
Aquí en España, tierra de gente seria, no solamente se colocan aparatos que permitan espirar, sino que las transcripciones de esas investigaciones judiciales que afecten a la oposición, se publican en los periódicos y al responsable de no haber preservado el sigilo de las escuchas se le propone para presidente del gobierno.
Para que los ingleses aprendan.
A menos que los ingleses no sepan qué es eso de la democracia y necesiten que los gobiernen políticos españoles, blindados por naturaleza contra la debilidad de dimitir.
Si lo contrario fuera lo cierto, la lección es clara: necesitamos en España políticos ingleses a los que no haya que darles una patada en el trasero para que despeguen su trasero del sillón, cuando metan la pata.

domingo, 17 de julio de 2011

CAMPS Y EUTROPIO

Si los del PP llevan años culpando al PSOE de nimiedades como la crisis económica, el paro, avisar a los etarras para que huyan, hacer eres de mentirijillas, favorecer empresas de familiares, forrarse con caballos o meter en nómina a todo el que los vote ha sido, ahora ha quedado claro, para que no se hable de la desvergüenza de que a uno de ellos le regalaran unos trajes.
Aun en el caso improbable de que los del PP demostraran la veracidad de lo que dicen, ¿en qué habría favorecido a los del PSOE?
Lo de la crisis, no hay más que ver la cara de pena del Presidente Rodríguez cuando habla de ella y lo desmejorado que está, prueba que es él quien más la está sufriendo.
Si avisaron a los etarras fue para que no tener que inventar tratamientos de fertilidad o atención a familiares para soltarlos. Al evitar el engorro de encarcelarlos se ahorró la complicación de dejarlos libres antes de que cumplieran la condena.
Los ERE remediaron estados de necesidad en momentos de penuria, lo mismo que los empleos del estado, pagados con dinero presupuestado y, por lo tanto, legal.
Lo de los caballos y el favor a la empresa en la que trabajaba la niña, más que crítica merece elogio porque, si se hizo lo que no debería haberse hecho, fue violentando el deber político en beneficio de uno superior, el deber familiar.
Naderías, como se ve, todas esas críticas injustas de los populares a los socialistas porque los beneficiados fueron la familia y los pobres, preocupaciones básicas de la caritativa e hipócrita derecha en la sociedad que propone.
Por contra, ¿qué decir de lo de los trajes, esa irregularidad monstruosa que los del PP intentaban ocultar, colocando la venda en el sarpullido del PSOE para distraer de la operación quirúrgica que uno de ellos requería?
No hay excusas porque los trajes no remediaban estados de necesidad, ni mejoraban la elegancia de los familiares del trajeado. Aceptó el regalo por vanidad, para realzar la prestancia pinturera de su palmito.
Si el trajeado hubiera sido Eutropio, San Juan Crisóstomo hubiera repetido su amonestación: vanidad de vanidades…

martes, 28 de junio de 2011

¿ESTADO CATASTRÓFICO O ESTADO DESESPERADO?

“El Pais” se queja de que el Partido Popular no haya apoyado al gobierno que tutela el periódico en ninguna de sus medidas para superar la crisis.
En su edición del día señalado para debatir si el Estado de la Nación es desesperado o catastrófico, enumera los proyectos que no apoyó el partido de la oposición: plan de recortes de mayo de 2010, reforma laboral, reforma del sistema financiero, negociación colectiva y reforma de las pensiones.
No hizo falta el apoyo del Partido Popular porque, gracias a los votos de otros partidos en el Congreso, salieron adelante las medidas y el ejecutivo que la troika José Luis Rodríguez Zapatero, Alfredo Pérez Rubalcaba y el País impulsan encaminaron a España a la prosperidad que se vislumbra.
Y, si no necesitó apoyos del Partido Popular, ¿de qué se queja El Pais?
Puede que la situación del Estado no sea tan prometedora como dicen y necesitan culpar del paulatino agravamiento al Partido Popular, cuyas propuestas para enmendar el problema rechazaron.
Seguramente tampoco el Partido Popular cuando gobierne, si alguna vez gobierna, tenga el bálsamo de Fierabrás que cure las dolencias del Estado.
Pero el rechazo de los socialistas a las propuestas de los populares cuando se tramitaron las cinco medidas adoptadas permite abrigar esperanzas de que sean eficaces cuando tengan la mayoría parlamentaria precisa para ponerlas en vigor.
El diario El País, la cadena SER y los demás medios de PRISA son conscientes de que desprestigiar al Partido que pretende desalojar del gobierno al ejecutivo del que son propietarios es la mejor manera de defender lo que es suyo.
Si no fuera por eso, quién sabe si no admitirían que las medidas que el gobierno de Zapatero impulsó para salir de la crisis hubieran sido más eficaces si se hubieran aceptado las sugerencias del Partido Popular.
Pretensión ilusa porque la carga de la culpa que señala a los Populares por no apoyar al Gobierno tendrían que achacarla al Gobierno por no haber admitido las propuestas de los Populares.

miércoles, 15 de junio de 2011

SENECA Y LOS INDIGNADOS

Se aconseja evocar las enseñanzas del pasado para desentrañar los misterios del presente por lo que nadie mejor que Lucius Anneus Séneca, el maestro cordobés de ayer que tanto necesitan los alumnos cordobeses de hoy, para descifrar el enigma de los indignados.
Más incomprensible que el hombre, el mayor de los misterios, es la paulatina evolución a la violencia, la intransigencia y el totalitarismo de un movimiento que, como el de los indignados, nació plural, cándido y tolerante.
Puede que esa mutación en el comportamiento de los indignados, como la que se operó en 1820 en el naranjo del jardín de un monasterio de Brasil y que originó la variedad “navel”, haya sido espontánea y achacable a un capricho de la naturaleza.
Pero sería ingenuo descartar que la inocente efervescencia de la concentración de los indignados no haya sido manipulada para conseguir un efecto que bastardee su pureza original.
¿Qué diría el maestro Séneca? Ya lo hizo hace 20 siglos en su tragedia Medea :”cui prodest scelus, is fecit”. (“Aquel a quien aproveche el crimen es quien lo ha cometido”).
Soy cordobés como el maestro, pero me enveneno lentamente fumando, y no de una vez con cicuta.
Tampoco soy tan listo como Séneca, pero casi tan intuitivo como él porque, desde el primer momento, adiviné que el Partido Popular, que se beneficia de que la cordera se haya vuelto fiera de tanto acariciarla el PSOE, es el culpable del cambio de actitud de los indignados.
Séneca y yo estamos convencidos de que la perfidia del PP ha endemoniado el paradisíaco convivio de amor, paz, hermandad y buena voluntad de aquél botellón sin alcohol que fue la Puerta del Sol hasta transformarlo en la turba airada de Barcelona.
¿Y para qué?
Para justificar a Esperanza Aguirre, que comparó acertadamente el de los indignados con uno más de los fenómenos precursores de los totalitarismos.

domingo, 29 de mayo de 2011

DEMOCRACIA PERFECTA PARA DESIGNAR A RUBALCABA

Además de un anhelo tan inalcanzable como la felicidad, la democracia es un sistema de organización del Estado en que decide directamente el pueblo en asambleas, plebiscitos y referendos o, de forma indirecta, a través de representantes en los que delega la toma de decisiones.
El criterio de la mayoría, “los más” numerosos tras el cómputo de todas las opiniones expresadas libremente, prevalece sobre el de los discrepantes, que pueden o no quedar fraccionados en diferentes minorías.
En un sistema de democracia indirecta, como el español, los representantes de distintas minorías pueden sumar sus votos hasta prevalecer sobre la mayoría.
En la organización del Estado conocida por democracia son esenciales la garantía del derecho del ciudadano o de sus delegados para que expresen libremente su criterio y, como consecuencia, la formación de mayorías y menorías.
Es caracteristico de las Dictaduras la unanimidad de criterios pero hay dictadores que alardean de que la ausencia de discrepancia denota el más alto grado de democracia, el de la aceptación coincidente de la elección más adecuada.
Ejemplos no faltan para ilustrar ese peculiar sistema democrático, en el que la unanimidad desterró la imperfección democrática de mayorías y minorías: Lenin, Stalin, Mao, Castro, Hitler, o Mussolini son casos ilustrativos lejanos de ese respaldo unánime a sus dirigentes por parte de sus pueblos.
También se han dado casos en España del mismo fenómeno: el ya más lejano de Franco y el más cercano de Zapatero-Rubalcaba en la reunión que, por unanimidad, respaldó la propuesta del primero de ellos para que el segundo sea el candidato de su Partido a las próximas elecciones generales.

jueves, 26 de mayo de 2011

RUBALCABA, A LA SOMBRA DE ZAPATERO

El ciprés puede alcanzar una altura de 20 metros y su sombra, cuando el sol poniente la proyecta sobre el suelo, es tenebrosamente alargada.
En los cementerios, la alargada sombra del ciprés presagia desventuras lóbregas a quien en ella busca cobijo.
Tan tétricas como la de José Luis Rodríguez Zapatero sobre la fortuna del candidato del PSOE a las elecciones generales, si lo hiciera a la sombra del todavía secretario general del partido.
Algunos socialistas prudentes lo saben y, como en un ritual de exorcismo preventivo, pretenden redimir al candidato de la sombra ominosa de Zapatero forzando su salida de la Secretaría General por la puerta franca de un Congreso.
Arduo empeño: tan vacunado como Satanás de exorcismos o Noé de borrascas aparentemente inofensivas, Zapatero lo está de trucos politiqueros.
Después de la estratégica retirada de la delfina Carme Chacón y casi difuminado el reto frontal de Pachi López, las primarias como solución del propio Zapatero para designar sucesor parecen garantizadas.
Queda, a 48 horas del desenlace del pleito, la solución Rubalcaba como única aparente de una competición por la sucesión sin contrincantes que la ennoblezcan.
¿Se atreverá el taimado Alfredo Pérez Rubalcaba a presentarse a las elecciones por el Partido Socialista como heredero, y tutelado por Zapatero desde la secretaría general del PSOE?
Si quiere convencer de que su proyecto difiere del que tan lealmente ha ayudado a Zapatero a protagonizar, todavía tiene tiempo: le basta con sumarse a quienes piden la celebración de un Congreso para que el Partido Socialista acuda a las urnas dirigido por un nuevo secretario general.
Si Rubalcaba pretende suceder a Zapatero en la Presidencia del Gobierno, sin haberlo desplazado antes de la Secretaría General del Partido, los electores tienen derecho a sospechar que, aunque voten otro nombre, seguirán votando la continuación de lo mismo.
Como la del ciprés del camposanto, la sombra de Zapatero es alargada y, por ahora, cobija a Rubalcaba.

viernes, 6 de mayo de 2011

BILDU-RUBALCABA, ¿CAUSALIDAD O CASUALIDAD?

La experiencia aconseja establecer una relación de causalidad entre acontecimientos aparentemente ajenos, achacables a la casualidad.
Por ejemplo: en Abril de 2006, José Luis Rodríguez Zapatero nombró ministro del Interior—el departamento ministerial dedicado en cuerpo y alma desde hace 40 años a luchar contra el terrorismo de ETA—a Alfredo Pérez Rubalcaba.
El 30 de Junio de ese año, Zapatero anunció un cambio radical en la política antiterrorista inspirada en el Pacto con el Partido Popular, que había apadrinado, y notificó el inicio de negociaciones con ETA.
¿Estoy sugiriendo que el nombramiento de Rubalcaba hace cinco años ha dado sus frutos, al enmendar la plana el Tribunal Constitucional al Tribunal Supremo para que ETA esté representada en las elecciones?.
Sí.
Pero que nadie se rasgue las vestiduras ni ponga cenizas en sus cabellos, en caso de que los conserve.
Personalmente, me parece muy bien que, en una democracia como dicen que es ésta, hasta los antidemócratas puedan tener voz y solicitar el respaldo de los votantes para acabar con el sistema.
Ni a la opinión ni a palabras que no ofendan a los demás hay que tenerles miedo porque, como Benito Juárez predicó, el respeto al derecho ajeno es la paz.
Los que no se sientan españoles tienen derecho a rechazar la nacionalidad española, a persuadir a otros para que los secunden y a proponer una identidad nacional diferente.
Pero sin emplear la violencia ni la coacción para imponer por la fuerza la aceptación o el sometimiento de los que discrepen.
Un sistema que garantice el derecho a la libre elección de nacionalidad tiene una contrapartida: la garantía de la protección de los discrepantes y la certeza del castigo implacable contra quien induzca o ejerza violencia para imponer su derecho.
La justicia de Obama, sin los escrúpulos de González.
Pero, ¿es la independencia del Pais Vasco, como dicen, lo que subyace en el programa de Bildu, la ETA electoral?
Eso es lo que nos habían hecho creer quienes, aparentemente, no tienen ni idea porque Deia, el periódico de la zona, sugiere que ese objetivo es secundario en los planes de la franquicia legalizada:
Titular de Deia digital anunciando el visto bueno del Constitucional:
“Bildu podrá presentarse a unas elecciones que exigen soluciones a la situación de paro y crisis”
Como cualquier partido de ámbito español o cualquier formación nacionalista del resto de España. ¿Y para eso tanto jaleo?

lunes, 2 de mayo de 2011

EJECUCION SUMARIA DE BIN LADEN

Los Estados Unidos, en palabras textuales de su presidente Barack Obama, “han llevado a cabo una operación para matar a Osama Bin Laden, el líder de Al Qaeda”.
Se ha hecho justicia, sin los privilegios procesales en los que se amparan los delincuentes para eludir la ley.
Solo una apariencia de legalidad se ha respetado en la ejecución del terrorista: la presencia de pakistaníes en la operación, para poderla calificar de “conjunta” y justificar la intervención de soldados norteamericanos en un país con el que los Estados Unidos no están en guerra.
La misión de los soldados era “matar” a Bin Laden, sin los engorros formalistas de detenerlo, conseguir su extradición, acusarlo, garantizarle defensa legal, someterlo a juicio, lograr su condena, permitirle agotar sus posibilidades de recurso contra la sentencia y solo después, y en el caso de que la condena hubiera sido a muerte, ejecutarla.
Bien está, y si hasta el propio Bin Laden se vanagloriaba de los crímenes por los que le han dado muerte, sería absurdo insinuar su inocencia.
Pero, si lo que ha hecho Barack Obama le parece bien a los que les cae en gracia—a la progresía de diseño—no se entiende que comprendieran a Felipe González cuando impidió que mataran a la jefatura de ETA.
¿Son los asesinos etarras menos sanguinarios que los de Al Qaeda? ¿Son más dignos de castigo los asesinos integristas musulmanes que los terroristas separatistas?
Si los asesinos son igualmente merecedores de castigo, ¿son diferentes las víctimas?

EJECUCION SUMARIA DE BIN LADEN




Los Estados Unidos, en palabras textuales de su presidente Barack Obama, “han llevado a cabo una operación para matar a Osama Bin Laden, el líder de Al Qaeda”.
Se ha hecho justicia, sin los privilegios procesales en los que se amparan los delincuentes para eludir la ley.
Solo una apariencia de legalidad se ha respetado en la ejecución del terrorista: la presencia de pakistaníes en la operación, para poderla calificar de “conjunta” y justificar la intervención de soldados norteamericanos en un país con el que los Estados Unidos no están en guerra.
La misión de los soldados era “matar” a Bin Laden, sin los engorros formalistas de detenerlo, conseguir su extradición, acusarlo, garantizarle defensa legal, someterlo a juicio, lograr su condena, permitirle agotar sus posibilidades de recurso contra la sentencia y solo después, y en el caso de que la condena hubiera sido a muerte, ejecutarla.
Bien está, y si hasta el propio Bin Laden se vanagloriaba de los crímenes por los que le han dado muerte, sería absurdo insinuar su inocencia.
Pero, si lo que ha hecho Barack Obama le parece bien a los que les cae en gracia—a la progresía de diseño—no se entiende que comprendieran a Felipe González cuando impidió que mataran a la jefatura de ETA.
¿Son los asesinos etarras menos sanguinarios que los de Al Qaeda? ¿Son más dignos de castigo los asesinos integristas musulmanes que los terroristas separatistas?
Si los asesinos son igualmente merecedores de castigo, ¿son diferentes las víctimas?


miércoles, 13 de abril de 2011

PORTUGAL: LA CRISIS DE LA QUE NADIE QUIERE HABLAR.

Puede que las ideologías entraran hace tiempo en fase crepuscular en el resto del mundo pero en Portugal, el jardín de Europa plantado junto al mar, conservan su vigor auroral.
Prueba de ese fenómeno fue el trasfondo ideológico de la fugaz conversación entre el primer ministro de Portugal, el socialista José Sócrates y Pedro Paços Coelho, candidato a sucederlo como representante de los socialdemócratas, de matiz conservador.
La media hora del encuentro tenía por objeto acordar una posición conjunta sobre lo que Portugal necesita que le presten para salir del atolladero, fijar los recortes al gasto y consensuar cómo debe incrementar el Estado sus ingresos para devolver a los acreedores los 80.000 millones de euros que piden.
Aparentemente, una simple cuestión de contar habas, de renunciar a lo superfluo y estimular la producción rentable. Un problema de técnicos más que de políticos pero, como en Portugal le sobra al debate ideológico la pujanza que a la actividad económica le falta, el acuerdo no fue posible.
Paços Coelho, el conservador, dijo que el socialista se negaba a dar prioridad a los recortes que supongan un adelgazamiento en la burocracia del Estado y liberen a los contribuyentes de impuestos y trabas administrativas que frenan la iniciativa empresarial.
Sócrates, como correligionarios socialistas de otros lugares, culpa de la crisis y de la intervención internacional en la economía portuguesa al líder de la oposición porque, después de haberlo apoyado en tres planes sucesivos anteriores, en Marzo le negó apoyo parlamentario para un cuarto.
Andan por aquí desde ésta mañana los técnicos internacionales llegados para evaluar la realidad de la situación, las necesidades reales de ayuda de Portugal y sus posibilidades de cumplir un riguroso plan para enderezar el entuerto y devolver los créditos.
Los ceremoniosos portugueses, poco expresivos cuando exteriorizan sentimientos y siempre comedidos en la selección de palabras para expresarlos, en ésta ocasión se han superado a sí mismos.
Apenas hablan de lo que se les ha caído encima, no se sabe si por el pudor del hidalgo venido a menos o como deliberada negación de una realidad desagradable,
Contrasta esa parquedad dialéctica de los portugueses con la abrumadora locuacidad de sus vecinos orientales que, desde haced dos años, no dejan de hablar de la crisis económica.
La primera fórmula no es mejor que la segunda, sino resultado de una respuesta congruente con la influencia cultural heredada por españoles y portugueses: los primeros, condicionados por su herencia argentina, espantan sus males aireando sus traumas para que, como en el sicoanálisis, se desvanezcan al contacto con la realidad.
La herencia cultural inglesa de los portugueses los induce a resolver en la intimidad los problemas íntimos que, si se airean, no añaden más que el mal gusto de que los demás sepan lo que no les atañe.
Lo digan o lo oculten, la crisis que se traen entre manos los portugueses es de aúpa: el litro de combustible es diez céntimos de euro más caro que el de sus vecinos, por cada cien kilómetros de autopista tienen que pagar seis euros de peaje, los precios de los productos de consumo son iguales o superiores, la seguridad social paga parte del precio de las medicinas a los jubilados que cobren menos del salario mínimo y hoy admitió el gobierno que las retenciones del salario de 80.000 policías y GNR (la guardia civil de aquí) no las hizo llegar a la Seguridad Social.
Que los ciudadanos hablen de la crisis que los afecta no la mitiga, pero el asentimiento del mutismo tampoco.

lunes, 4 de abril de 2011

JOSE LUIS, ¿PATO SENTADO O PATO COJO?

La inagotable capacidad analítica de los tertulianos españoles—esa evolución resultante de la mayor demanda ambiental de opinión que de información—ha encontrado de forma corporativa un animal hasta ahora desconocido: el pato cojo.
Debe ser una variante del “sitting duck”, o pato sentado en traducción literal a esta especie de serbocroata que es ya el español y que, hasta ahora, era como se llamaba en el lenguaje coloquial de los Estados Unidos al político que recibe disparos por todas partes, sin poder defenderse.
Al pobre José Luis, al que el otro día dijo que se iba pero que todavía no se ha ido, a los tertulianos españoles les ha dado por calificarlo de “pato cojo”, seguramente por analogía con los señuelos que los cazadores colocan en los charcos para atraer a sus congéneres voladores.
Sería bueno que se aclararan los que así llaman al bueno de Zapatero, que se habrá quedado sin ideas ni recursos para sobrevivir en la política, pero todavía conserva buenas piernas para salir huyendo.
En caso de que además de “patos sentados” haya “patos cojos”, los tertulianos españoles ameritan un reconocimiento adicional al de su capacidad dialéctica de justificar a toro pasado lo que sostenían hasta que el morlaco inició la arrancada.
Se merecen, por lo menos, el premio nobel de ornitología por descubrir una clase de pato que en los Estados Unidos, donde dicen que existe, nadie hasta ahora había descubierto.
Y, por cierto, a la gobernadora de Alaska e imagen del regeneracionismo frente a la abusiva intromisión estatal en la vida de los ciudadanos, Sarah Palin, la Sociedad Nacional de Columnistas de Periódicos de los Estados Unidos le concedió su premio Sitting Duck 2009.
Quien le iba a decir a José Luis que iban a compararlo con la Palin.

sábado, 2 de abril de 2011

LEIRE PAJIN, PRESIDENTA

Cloroformizado por la monotonía urbana, la renuncia de José Luis Rodríguez Zapatero a la reelección me habría hecho pensar en el final de algo que, aunque malo, podría no serlo tanto como lo que detrás venga.
Pero conocí la noticia recién expatriado de cinco días absorto en la dorada pátina de la floración sobre la adustez de las encinas, del manso viento que mece las flores de los cantuesos, del galanteo de los pájaros con sus cantos más irresistible para que las hembras de su especie perpetúen la vida.
En definitiva, que el anuncio de que Zapatero abandona la política activa, para el que la conoce después de una semana en la gloria sensual de una dehesa en Sierra Morena, es preludio de lo que viene y no ocaso de lo que se va.
¿Quien, después de una semana así, puede desear que al maquiavelismo maniobrero del actual presidente del gobierno le suceda la astucia retorcida de Rubalcaba?
Cambiar el posibilismo acomodaticio de Carme Chacón por el oportunismo permanentemente coyuntural de Zapatero no es cambio, sino más de lo mismo y la dialéctica de sacristán de José Bono, si el actual presidente de las Cortes fuera el sucesor,sería idéntica a la incontinencia verbal del actual presidente.
Contágiese España de primavera y busque un cambio radical y no meramente nominal al escoger nuevo Presidente del Gobierno.
Este esplendor de la naturaleza invita a descartar la ficción conceptual e inclinarse por la realidad tangible, a desconfiar de argucias argumentales y dejarse seducir por evidencias palpables.
Es hora también, después del fracaso de tantas propuestas ideológicas, de confiar en la oscura llamada del primitivismo instintivo y de sucumbir a la tentación atávica de la tan denostada irracionalidad del ser humano.
Es hora, en definitiva, de pronunciarse por Leire Pajín como próxima Presidenta del Gobierno.

viernes, 18 de marzo de 2011

LIBIA Y LA INSENSATEZ DE ZAPATERO

El neobelicista y criptopacifista José Luis Rodríguez Zapatero mandará militares españoles a combatir en Libia, una insensatez sin otra explicación que la ignorancia del Presidente del Gobierno.
El pretexto es que la democracia desplace del poder a la dictadura de Muammar Gadafi y acabe así la opresión del pueblo libio.
Los gobiernos de raíz cristiana, entre ellos el de España, se exponen a que su injerencia en el pleito libio propicie que una dictadura teocrática, más inclemente que la laica derribada, agudice la opresión de la población.
Indefectiblemente, esa ha sido la consecuencia cada vez que gobiernos de países no musulmanes, con el pretexto de extender los beneficios de su cultura, han intervenido en países de tradición islámica.
El general inglés retirado Sir John Hackett y otros prestigiosos estrategas de la OTAN publicaron en 1978 “The Third World War:Augustus 1985” y la conmoción que provocó duró pocos meses porque, en Enero de 1979, la dictadura teocrática del Ayatollah Jomeini reemplazó la tecnocrática del Sha Reza Pahlevi.
El libro, que predice cómo se desarrollaría una guerra entre la OTAN y el Pacto de Varsovia tras un incidente armado en Agosto de 1985 en Yugoslavia, centra uno de los episodios bélicos en la lucha por el petróleo iraní, naturalmente aliado bajo el Sha, de Occidente y los Estados Unidos.
Fue tan abultado el error de cálculo sobre el futuro de Irán que los autores tuvieron que rehacer en 1983 lo que habían publicado en 1978.
Por el tiempo en que el libro se publicó, la sociedad iraní le pareció a este testigo una de las que había conocido de esa cultura más dinámicas y abiertas.
El retroceso en el disfrute de libertades que los iraníes soportan desde entonces no hubiera sido posible si el gobierno francés y el embajador de los Estados Unidos en París no hubieran convencido al candoroso Jimmy Carter de que el régimen que implantaría el Ayatollah Jomeini garantizaría mejor las libertades individuales que el del Sha.
La pujanza expansionista del chiismo de los ayatollhas desencadenó otro error norteamericano que todavía sufre el mundo: para frenar a Irán, respaldó el militarismo del sunnita Sadam Husein, que desembocó en la guerra irako-iraní, la invasión de Kuwait y la violencia que no cesa en la zona.
Arabía Saudita, aliada de los Estados Unidos y cuna del waabismo sunní, financió las madrazas de todo el mundo—Chechenia, y Magreb sobre todo-- para frenar el renacimiento chií resultante del asentamiento de Jomeini en Irán.
Muchos enraízan el fanatismo terrorista de los grupos magrebíes en la contraofensiva sunnita del dinero saudí.
Al difunto congresista Texano Charlie Wilson habría que responsabilizar de haber convencido al congreso de los Estados Unidos para que financiara a la CIA y proveyera de lanzamisiles antihelicópteros, decisivos en la derrota del ejército invasor soviético.
Los soviéticos, como apóstoles del comunismo que es una derivación del cristianismo, habían intentado meter en el mundo moderno a Afganistán y estuvieron a punto de lograrlo, tras los intentos fallidos de Alejandro e Inglaterra.
Si no hubiera sido por Charlie Wilson y la CIA lo hubieran conseguido. La consecuencia del fracaso fue el atentado de las torres gemelas, el cerco actual de los talibanes a Kabul y la guerra que sigue coleando en Afganistán.
La intervención en Libia en la que tan interesado está Zapatero puede que tenga consecuencias similares, como siempre que los pueblos de raíz cristiana se inmiscuyen para que los musulmanes adopten sistemas basados en la frase evangélica “al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios”.
Esa filosofía, que fundamenta la división de poderes en las sociedades derivadas del cristianismo, es blasfema para el buen musulmán porque todo el poder, incluido el del César, es atributo exclusivo de Dios.
Harían bien Zapatero y sus colegas cristianos en la gobernanza, en dejar que los moros hagan lo que quieran siempre que el mal se lo hagan entre ellos y no nos salpique a los demás.
No hay mejor política respecto a los musulmanes que añadir a la obra de misericordia “enseñar al que no sabe” la que aconseja la prudencia: “no enseñar al que no quiera aprender”.

jueves, 17 de marzo de 2011

EL DICHOSO Y VIEJO RIO GRANDE

Diga lo que haya dicho el Tribunal Constitucional, a los andaluces les corresponden todas las competencias, derechos y control sobre las aguas del Río Guadalquivir, genuina vena aorta de Andalucía.
¿Es que sobre esa arteria reguladora del flujo sanguíneo en el organismo humano puede decidir alguien ajeno a quien la aloja?
Como los catalanes hicieron con los artículos de su estatuto que el Constitucional declaró incompatibles con la Constitución Española, los andaluces también deberían buscarle las vueltas para ignorar la sentencia que dice que un artículo de su estatuto la contradice.
Hay dos maneras de hacerlo: por las buenas o por las malas.
Por las buenas, y si Extremadura se siente perjudicada por el artículo recurrido,
a) Se podría ofrecer a Extremadura que se constituya en protectorado de Andalucía.
b) Andalucía podría anexionarse la extremeña Badajoz como novena provincia andaluza. (La de Cáceres podría integrarse en Castilla-León, con la que tiene un conflicto similar respecto al Duero, y así habría en España una autonomía menos).
Por las malas, y si Extremadura rechaza esas generosas soluciones al conflicto que ha suscitado, Andalucía tiene un argumento irrebatible con el que justificar la inevitable acción armada:
Como todos los Estados, el andaluz se ha ido forjando a lo largo de tres mil años de Historia extendiendo su control sobre la cuenca del río que la vertebra, en éste caso el Guadalquivir.
Si Extremadura aduce que controla parte de esa cuenca, admite el derecho de Andalucía a ocupar un territorio irredento, para alcanzar su destino nacional.
Queda claro que razones no les faltan a los andaluces para invadir, conquistar e incorporar a su soberanía ese espacio vital (lebensraum) en disputa.
Lo malo es que, posiblemente, si los andaluces se pelearan con los extremeños, los segundos derrotarían a los primeros porque son más austeros, laboriosos y aguerridos.
Además, la inminencia del verano, que por estas tierras aumenta tanto las temperaturas que disuade a sus habitantes de esfuerzos superiores al de abanicarse, es el momento menos oportuno para liarse la manta a la cabeza y andar por ahí, bajo el sol inclemente, expuestos al fuego de las armas extremeñas.
Que los extremeños, pues, se queden con el río, su cuenca, sus peces y sus inundaciones.

martes, 15 de marzo de 2011

LA CORRUPCION IMPERCEPTIBLE

Está alborotado el gallinero porque algunas de las aves de la estirpe que manda desde que se montó el tinglado han picoteado más de la cuenta en el comedero.
Los de la estirpe que pretenden que los suyos tengan acceso preferente al comedero no paran de cacarear para que los pollos y gallinas de plumaje indefinido los ayuden a sustituir a los malos conocidos por los buenos por conocer.
Las aves, que van a lo suyo y que bastante tienen con evitar que en el cruce de picotazos les dañen la cresta, no saben qué hacer porque, aunque algunos de los que mandan hubiera comido demasiado, a ninguna le faltó su ración de trigo.
Desde que los encerraron para proteger su bienestar, aunque lo único que importaba a los carceleros era explotarlos mejor, los inquilinos del gallinero saben que quien picotea en lo que es de todos no perjudica a nadie.
No era así en los tiempos en que, a cambio de su libertad, cada uno tenía obligación de procurarse su propio sustento y los más audaces, los más emprendedores o los más afortunados se quedaban con la comida más apetitosa.
No es necesario ser un águila para establecer el paralelismo entre el gallinero y Andalucía, ni el alboroto originado por el metemano de los ERE, Mercasevilla o los fondos europeos, con los gallinos aprovechones.
Ni los unos ni los otros tienen la menor importancia por mucho escándalo que provoquen, si no se encuadran en la corrupción ambiental de la que lo que escandaliza son meros síntomas.
Sirva de modelo Palma del Río, un municipio de 21.000 habitantes de la provincia de Córdoba que, en el conjunto de la región, sobresale por la pujanza de su economía, la razonable eficacia de los servicios públicos y la meritoria honestidad personal de los responsables municipales.
Una cuarta parte de los que viven en este pueblo, equidistante de Norte a Sur entre Hinojosa del Duque y Tarifa y de Oeste a Este entre Ayamonte y Garrucha, cobran el subsidio del Plan de Empleo Rural aunque, durante los ya lejanos años de bonanza, para las labores agrícolas se recurría a los inmigrantes.
Los problemas más acuciantes de Palma del Río son la falta de estacionamiento para los autos, la precaria fragilidad del suministro eléctrico, la limitada oferta de atención sanitaria, la insuficiente frecuencia de los enlaces ferroviarios, el monopolio de hecho de la tenue cobertura telefónica y, como diagnóstico global de esas carencias, la abulia inversora del capital privado en la economía.
La fisonomía de Palma del Río se sigue transformando de manera constante: se ha restaurado un convento cuyo singular claustro mudéjar enseñan a grupos de escolares, permanece cerrado los días festivos y en el que sus amplios salones muestran la desnudez de sus paredes de forma casi permanente.
Hay un teatro espectacular que, cada año, se utiliza siete días para que teloneros de mítines políticos pasen una semana a cama y mesa puesta Y por la noche ofrezcan espectáculos de vanguardia que nadie comprende.
Se ha puesto en marcha un palacio de congresos, en el que los improbables congresistas tendrán que pernoctar lejos del pueblo, se va a hacer una piscina-parque acuático de más de 500 metros cuadrados con chorritos de agua y ya se han dado las primeras paladas para un “Centro de Interpretación del Río Guadalquivir”, con sus senderos para bicicletas, sus salas de exposiciones, su almacén de piraguas y otras amenidades.
Están adelantadas las negociaciones para adquirir un par de edificios que se dedicarán a un museo taurino, a otro de moda y diseño y hay `planes para otra media docena de proyectos lúdicos,en los que gastar lo que pudieran reportar fábricas o negocios que a nadie se le ocurre echar a andar.
No es dinero que se detrae de las necesidades del pueblo el que se destinará a palacios de congresos, museos, paseos en bicicleta, piscinas con chorritos de agua y demás zarandajas porque en su mayor parte se financiarán con fondos FEDER europeos y de Desarrollo Rural, que solo tienen aplicación en proyectos de éste tipo.
Una vez en marcha, por supuesto, el mantenimiento de las amenidades, su gestión, personal, monitores y reposición de material tendrán que sufragarlos los impuestos de los habitantes del pueblo.
En tiempos de opulencia ya idos, persiste la mentalidad de la negra época de la cartilla de racionamiento: si la comida con la que uno puede atiborrarse es gratis, mejor engullirla toda que abstenerse para evitar la indigestión.
Por eso, los ERE, Mercasevilla y otros escándalos son erupciones llamativas de la corrupción ambiental a la que es tan cómodo acostumbrarse y que ha invertido los términos de la relación entre el Estado y la Sociedad: hasta hace poco, eran Estados sólidos los financiados por una sociedad próspera y, ahora, las sociedades más prósperas son las que más `pródigamente subvenciona el Estado.

miércoles, 2 de marzo de 2011

NO TENGO NADA QUE VER CON LOS ERE DE ANDALUCIA

“El ex consejero andaluz Antonio Fernández se acogió a un ERE en el que aparece que comenzó a trabajar el día de su nacimiento”: Titular en prensa.



A pesar de que lo que se lee en la página 76 del capítulo IV (“Campos y ciudades”) del libro “Sentencias salomónicas para doce problemas humanos y para uno divino” pueda señalarme como inductor, niego toda responsabilidad en lo que el consejero Fernández hizo.
Cito la frase de la obra de la que soy autor y que podría inculparme: “Al inscribir a un recién nacido español en el Registro Civil se expedirá a su nombre un certificado que le garantice todos los beneficios de la prejubilación, como afectado por un “Expediente de Regulación de Empleo” que lo apartará, desde la cuna a la tumba, de la tentación de trabajar”.
No pudo inspirarse Antonio Fernández, en 2008, en esa frase de mi libro editado el año antes porque “Sentencias Salomónicas” vendió tan pocos ejemplares como las “Notas marruecas de un soldado" de Ernesto Giménez Caballero y, ni de lejos, aspiró a calar tan hondo como la obra del propulsor del fascismo español.
Pero no puedo dejar de sentirme orgulloso de que mi propuesta para resolver los problemas de la sociedad coincidiera con la fórmula que aprovechó uno de los individuos de esa sociedad para resolver su problema.
No quiero ser pretencioso, pero me malicio que José Luis Rodríguez Zapatero, aunque evidentemente no haya leído las “Sentencias salomónicas”, de forma intuitiva por lo menos coincide con sus postulados tanto como su correligionario Antonio Fernández.
En su página 79 dice el libro: “…como los españoles hemos demostrado que el de gobernarnos es el trabajo en el que de forma más contumaz hemos fracasado, de la gestión del nuevo estado se encargaría un patronato de notables de todo el mundo, que hayan acreditado en sus países y en ocupaciones anteriores su capacidad de gestión”.
Exactamente, lo que el Presidente del Gobierno Español, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció el pasado Mayo.
Que conste, por tanto, que éste humilde escritor sin lectores no influyó en el Consejero andaluz del ERE de González Byass´ ni en el Presidente del Gobierno de España.
Antonio Fernandez, José Luis Rodríguez y éste servidor de ustedes, si no almas gemelas, somos por lo menos almas trillizas.

domingo, 27 de febrero de 2011

LOS ERE DE ANDALUCIA, CULPA DEL PP

Si es azaroso expatriarse no lo es menos retornar al país natal después de años en tierra extraña.
Es eso lo que está comprobando éste atribulado retornado tras casi medio siglo ausente de Andalucía, su patria, porque en ella nació y nacieron sus padres.
Para no desentonar de la forma de sentir y pensar de los habitantes de las tierras que lo acogieron, tuvo que amoldar sus peculiaridades congénitas a las de quienes lo admitieron.
Se adaptó e integró en la comunidad que lo acogió, los nuevos modos y costumbres pernearon su forma de ser y, cuando regresó a su patria, se sentía a veces extraño entre los de su propia tierra.
Es por tanto el del retornado un vivir como fue y ya no es, como quiere volver a ser sin lograr desprenderse de lo que fue mestizando su epidermis durante años.
Paulatina e imperceptiblemente se transformó en anfibio, en híbrido consecuencia de un injerto, en un viajero sin origen ni destino definidos, a medio camino siempre entre Córdoba y Semana Santa.
A veces, esa simbiosis entre pasado remoto que se quiere recuperar y pretérito reciente del que ni quiere ni puede desprenderse genera perplejidad.
Será por vicio profesional, pero se hace particularmente flagrante la ofuscación del retornado al analizar la disputa política y percatarse de la imposibilidad de entenderla.
Por ejemplo: los ERE supuestamente fraudulentos por los que el Partido Popular culpa a la Junta de Andalucía y de los que los socialistas, perennes manijeros de la Junta de Andalucía, culpan al Partido Popular.
Manuel Chaves, que ahora funge de vicepresidente del gobierno de toda la nación y que fue el capataz de los manijeros de la Junta cuando lo de los ERE dijo en el Senado que la responsabilidad del fraude, si lo hubiera, debería recaer en los entonces ministros de trabajo Javier Arenas o Eduardo Zaplana y en el delegado del gobierno Juan Ignacio Zoido, todos ellos evidentemente del Partido Popular.
El retornado, como un submarino que ni navega en superficie ni ciñéndose al fondo marino, está desconcertado: no sabe si guiarse por lo que la razón le dicta y creer a los populares, o por lo que le manda el sentimiento de solidaridad con el andaluz Chaves e inclinarse por los socialistas.
Puede más el atávico tirón telúrico y opta por darle la razón a Chaves,
Ha influido en esa decisión también el magisterio de los fabulistas que, como Jean de Lafontaine en “La rana y el alacrán” proponen comportamientos de los animales para mejor comprender los, algunas veces, incomprensibles actos humanos.
Recordemos que el alacrán, a pesar de que convence a la rana de que, si le clavara el aguijón mientras lo ayuda a cruzar el río también moriría ahogado, fiel al dictado se su naturaleza, lo hace.
¿Fue más culpable la rana de dejarse engañar por el escorpión, aunque debería estar advertida de que la naturaleza lo obligaba a emplear el aguijón?
¿Fueron Zaplana y los del Partido Popular culpables de haber ignorado que está en la naturaleza de los socialistas creer que todos los recursos pertenecen al Estado y que Estado, Gobierno y Partido son herramientas para cambiar la sociedad en la dirección que el Partido decida?
Como la rana, deberían haberlo sabido. La culpa del escándalo de los ERE es del Partido Popular por haberse fiado, desde el Gobierno de Madrid, de lo que los socialistas, por mandato de su naturaleza, estaban haciendo en Andalucía.

lunes, 14 de febrero de 2011

CORDOBA: RESUCITO EL COMUNISMO

Quien renuncie a conseguir por sí mismo lo que necesita para vivir no podrá defender su libertad frente al que se lo proporcione.
Hay españoles que, si no han perdido ya su libertad, están en peligro de que se las reclame el Estado, al que ellos mismos reconocen que deben su sustento.
Solo el 14,5 por ciento de los cordobeses--los que creen que el bienestar de su provincia se basa en actividades económicas de iniciativa privada—confían en el propio esfuerzo como forma de vida.
Los demás, según datos del Barómetro de Opinión Pública de la provincia, creen que son los subsidios y las ayudas estatales los pilares de su subsistencia.
Fernando Expósito, vicepresidente de la Diputación cordobesa, reveló que el 34 por ciento de los cordobeses atribuían a los subsidios del Plan de Empleo Rural (PER) la gracia de su bienestar.
Otro 20 por ciento identificó sus ingresos con las subvenciones europeas de la Política Agraria Común.
Los datos revelados por Expósito confirman el cambio que se ha venido operando en Andalucía de forma tan paulatina y gradual que sorprende la revolución que ha significado en la relación del ciudadano con el Estado.
Originalmente, el Estado se sustentaba en la sociedad civil independiente de la burocracia gubernamental, de la detraía la financiación necesaria para los servicios públicos que prestaba al conjunto de la población.
El Estado, como parásito de la sociedad civil, era tan vigoroso como próspera fuera la sociedad de la que se nutría.
Era el Estado una herramienta que la sociedad utilizaba para conseguir con mayor eficacia los fines a los que aspiraba, y adecuaba los medios que ponía a disposición del Estado al cumplimiento de los proyectos que le encomendaba.
Pero una dejación de su responsabilidad de supervisión y un simultáneo apetito del Estado por asumir las funciones de las que la sociedad hizo dejación ha alterado el equilibrio original.
De herramienta al servicio de la sociedad civil que lo había creado, el Estado ha evolucionado a sistema organizativo de la propia sociedad, a la que ha fagocitado.
La sociedad tenía derecho a exigirle eficacia al Estado porque lo financiaba pero, si las funciones se invierten y los propios ciudadanos reconocen que es el Estado el que los sustenta, pasan a ser instrumentos del Estado que nació como herramienta de la Sociedad.
Sin que nadie se haya percatado, en ésta Córdoba de las culturas emanadas de las tres religiones del libro, ha triunfado una revolución más honda que la marcada por la caída del muro de Berlín o por la huida de los dictadores laicos de países musulmanes: ha resucitado el comunismo.

jueves, 27 de enero de 2011

SOLUCIÓN PARA QUE EL FUTBOL RECUPERE EL INTERES PERDIDO

Como hombre que es, aunque su creciente esfericidad lo disfrace, nada humano le es ajeno a Salomón Cabeza Sagaz .
Si viviera ahora y no hace 2.200 años cuando el fútbol todavía no se había inventado, Publio Terencio Africano se habría devanado los sesos, como el pasado fin de semana hizo Salomón, para incentivar el interés menguante por la Liga Española.
Salomón, a quien la mitad de sus conocidos—los que lo envidian—llaman en coña Alfonso Décimo, meditaba sobre la yema terminal y su facultad de permitir el crecimiento indefinido del rizoma monopodial cuando algo que decía El Ditero le llamó la atención.
--Que aunque pago para ver por televisión cada semana—le aclaró el Ditero—diez o doce partidos de fútbol, solo me interesan los Barcelona-Real Madrid.
En la siguiente tertulia, Alfonso Décimo aportó la solución al gravísimo problema que El Ditero había suscitado:
--Es de la máxima urgencia—propuso—un gran acuerdo nacional de las fuerzas políticas, sindicales, gastronómicas y deportivas para consensuar un sistema de handicaps que devuelva el interés que el fútbol ha perdido.
Como estaba improvisando sobre la marcha, y aunque su talento pese más que las nueve arrobas de su cuerpo, lo que sugirió Alfonso Décimo, más o menos es que:
--Son los clubes de mayor poder económico los que tienen equipos con más seguidores.
-- El diferencial de capacidad económica de los clubes tiende fatalmente a aumentar.
--Mientras más acentuado sea ese diferencial, mayor será el desinterés de los aficionados por los equipos menos poderosos.
--Si no se introducen medidas correctoras con urgencia, las competiciones de futbol en España se limitarán a los partidos entre el Real Madrid y el Barcelona.
--Si eso llegara a ocurrir, sería una amenaza mayor para la supervivencia de España que la deuda soberana, la corrupción política, la economía sostenible con cargo a los presupuestos del estado o la disgregación territorial, ya que el fútbol es el mayor aglutinador del ser español.
Se propone un sistema de hándicap para las competiciones futboleras.
Por ejemplo:
Si el Almería y el Barcelona volvieran a enfrentarse, y teniendo en cuenta que los dos últimos encuentros arrojaron un resultado global favorable al Barcelona de 13-0, una victoria barcelonista por 6-0 le supondría un punto, tres puntos si gana por siete o más goles de diferencia y, una derrota por cinco o menos goles de diferencia daría los puntos al Almería.
Hay otras posibilidades: que según la tabla de handicaps acordada antes del comienzo de cada competición, los equipos alieneen más o menos futbolistas que los contrincantes a los que se enfrenten.

lunes, 24 de enero de 2011

EL PP Y EL SINDROME MOCTEZUMA

Palma del Río, donde el Partido Socialista gana siempre las elecciones, es un pueblo de 21.000 habitantes de la Vega del Guadalquivir en el que se disputará una parte de la contienda electoral que en Mayo trazará la nueva realidad política de España.
Dice David Bohm que cada parte de la realidad contiene la realidad completa así que la realidad electoral de Palma del Río podría reflejar la realidad electoral de la totalidad de España.
Sin el prestigio científico de Bohm, el Dalai Lama sostiene en su libro “The Universe in a single atome” la teoría que su título sugiere: que la mecánica del universo es similar a la de cada uno de sus átomos.
Coinciden con Hermes Trimegisto, al que se identifica con el dios egipcio Tot, en que por el estudio de una parte se puede conocer el todo.
Veamos, pues, lo que ha pasado en Palma del Río para pronosticar lo que, en las elecciones de Mayo, pasará en España:
Desde que se enviciaron los españoles en votar, los de Palma del Río han confiado tozudamente la gestión de su ayuntamiento al Partido Socialista.
Aunque mal no lo hayan hecho, parecía que en Mayo se verían arrastrados, por contagio o simpatía, en la debacle que se vaticina para sus correligionarios del resto del país.
Como en esa España que se extiende al norte del Guadalquivir, los del Partido Popular de Palma del Río han dejado que el Partido Socialista pierda las elecciones para ganarlas ellos.
Pero los del Partido Popular deben sufrir el síndrome Moctezuma por el que ha de entregar el poder a Quetzalcoatl.
Moctezuma confundió al extremeño Hernando Cortés, de rasgos caucásicos y con la cara cubierta de abundante vellosidad, con el dios Quetzalcoatl, la serpiente emplumada de la cosmogonía azteca al que la mitología representaba blanco y barbado.
El emperador de Tenochtitlan sabía que, fatalmente, tendría que devolver al Quetzalcoatl reencarnado en Cortés el poder del que era simple depositario.
En Palma del Río, el Partido Popular sabe que el papel que los dioses le han asignado en la representación de la comedia electoral es el de la oposición, y quizás por eso—o puede que por culpa de eso— la política es para ellos solo una distracción que no entorpece la tarea profesional con la que se ganan la vida.
Los del PSOE, sin embargo, tienen la política como actividad profesional exclusiva, de la que depende su bienestar y el de su familia.
Hay excepciones: Salvador Fuentes, conocido por aquí como El Mantecas, vendía las tortas que elaboraban en la panadería de su familia hasta que salió diputado regional del Partido Popular por Córdoba y la política pasó a ser el pan que, hasta entonces, ganaba con las tortas.
Por Palma del Río, se supone, ha debido seguir viniendo para ver a su familia pero sin inmiscuirse, entrometerse ni preocuparse de la política local. “Paula maiora canamus”, debió decir como Virgilio: “cantemos a cosas más distinguidas”, por lo que dedicó sus desvelos al Parlamento de Sevilla y se olvidó de los electores de su pueblo
Pero la habilidad excepcional del socialista Rodríguez Zapatero para meter la pata y enemistarse hasta con sus más leales partidarios abrió la inesperada posibilidad de que el Partido Socialista perdiera las elecciones municipales en Palma del Río.
En Córdoba, Sevilla y hasta en Madrid debieron pensar los del Partido Popular que esa oportunidad única de arrebatar al Psoe un feudo en el que no los dejaba meter cuchara no podían desaprovecharla. Se acordaron de que nunca habían visitado a sus correligionarios del pueblo, ni siquiera para que no se desanimaran por el desamparo en que los dejaban derrota tras derrota.
El Manteca, que es el funcionario que más alto ha llegado en la jerarquía del Partido Popular, olió poder, quiso apuntarse el éxito previsible, urdió su trama y metió la pata.
Sin consideración al esfuerzo de los que, por afición, habían mantenido a duras penas la bandera del Partido Popular durante años, maniobró para impedir que la candidatura de mayo la encabece el todavía portavoz municipal e impuso a un desconocido no afiliado que dimitió como respuesta a la repulsa que provocó su nombramiento.
El Mantecas se ha visto obligado a encabezar la candidatura de la que privó al representante electo por los afiliados locales al Partido Popular, tras haber renunciado a ella su apadrinado.
El resultado es previsible: el próximo Mayo, si el jefe supremo de los socialistas, José Luis Rodríguez Zapatero, no se supera a sí mismo como metepatas, el PSOE seguirá ganando las elecciones en Palma del Río.
Y el PP, que sin comerlo ni beberlo parecía que iba a ganar, seguirá en la oposición.

viernes, 14 de enero de 2011

AÑORANDO YA A ZAPATERO

Se antoja una eternidad el tiempo que falta para que descubramos que el gobierno de Mariano Rajoy es todavía peor que el de José Luis Rodríguez Zapatero.
Es una fatalidad axiomática en este sistema de desgobierno que los españoles se infligieron como penitencia contra el mayor engaño de su dictador: la muerte del que, como a Caudillo por la Gracia de Dios, le hubiera correspondido la inmortalidad.
Felipe González hizo bueno a Adolfo Suárez, José María Aznar a González y José Luis Rodríguez Zapatero a Aznar.
Leopoldo Calvo Sotelo, que aparte de embridar a los díscolos militares españoles metiéndolos en la OTAN para que se distraigan fuera y dejen de enredar dentro, hizo poco más en sus 20 meses de presidente, ni tuvo ocasión de hacer bueno a su antecesor ni su sucesor pudo hacerlo malo.
Cuando Suárez, González y Aznar perdieron el poder los españoles suspiraron de alivio y a duras penas contienen el suspiro que exhalarán cuando se vaya Zapatero.
Algo raro pasa aquí: ni todos los presidentes de la llamada democracia pudieron ser tan malos ni los españoles tan díscolos para ser gobernados porque en tres mil años de historia aclamaron a reyes degenerados, a favoritos venales, a inquisidores sanguinarios y a dictadores taimados.
¿Y si no son malos los presidentes de gobierno elegidos desde 1978, sino que son los españoles los que no saben elegir?
Antes de meterse en un nuevo embrollo electoral debería despejarse esa duda, para no seguir perdiendo el tiempo.
Indicios hay suficientes para que, en su propio provecho, se impida a los españoles escoger a sus gobernantes.
¿Cuándo ha gobernado mejor Zapatero que desde Mayo pasado? ¿Y qué pasó en Mayo para que Zapatero, que hasta entonces no había dado una a derechas, haya dejado de meter la pata?
Que dejó de mandar como presidente elegido por los españoles y comenzó a obedecer como comparsa dirigido por los extranjeros.
Bienaventurados los pueblos que, como los individuos, aprenden de sus errores. No han pagado mayor precio los españoles que el que les han cobrado por la falacia de que están capacitados para autogobernarse.
Son los españoles buenos vasallos que necesitan un buen señor, como demostraron al servir a la casa de Habsburgo hasta 1712 y a la de Borbón-Francia desde entonces.
El mayor servicio que Zapatero podría prestar a España, antes de que los españoles empiecen a echarlo de menos porque los gobierne Rajoy, sería convencer a su amigo Barack Obama, con quien comparte responsabilidad galáctica, para que los Estados Unidos acepten a España como su estado número 51.
Galicia está de Nueva York a solo poco más de 1.500 kilómetros más que Hawaii de California. Hora y media de vuelo. Una miseria. Seguro que los españoles obedecerán más a gusto al Obama de turno que al Sarkozy o la Merkel que corresponda.

sábado, 1 de enero de 2011

LA FIERA NATURALEZA

La naturaleza es como la cordera que Silverio Franconetti crió en su rebaño: se volvió fiera de tanto acariciarla.
La gente de Écija, Lora del Río y Palma del Río, que oyeron ya en sus cunas la letra de la serrana de Silverio, necesitan un responsable de las inundaciones que desde hace dos años los arruinan.
Temen que la culpa de que Genil y Guadalquivir, tan apacibles y moderados de ordinario, se desmelenen año sí y año también, sea de los ecolojetas.
Esta es tierra de gente que piensa y medita porque, sin gran esfuerzo físico, se obtiene mucho prestigio.
Pensar, sin embargo, no es coser y cantar: requiere tiempo, serenidad y digestiones sosegadas por lo que la sospecha de que los ecolojetas sean culpables de las riadas no es, por ahora, más que un barrunto.
Algún Averroes o Séneca formulará algún día de manera incontrovertible la teoría que todavía sólo es pálpito: que si el hombre sirve a la Naturaleza en vez de servirse de ella, tiene que aceptar sus caprichos y su tiranía.
Por una vez en su vida, sin embargo, el filósofo que ha de sustanciar la relación entre el mimo del hombre a la Naturaleza y el pago que recibe el ser humano debería apresurarse, porque hay impacientes dispuestos a llevar a la práctica lo que solo son por ahora teorías.
Dicen que, cuando Genil y Guadalquivir recibían sin depurar las aguas residuales de las poblaciones por las que discurren, se desbordaban cada cinco o seis años pero que, desde que las depuradoras funcionan, se salen de madre cada año, y en más de una ocasión.
Recuerdan que cuando se podían usar toda clase de herbicidas, insecticidas y abonos, el hombre y la Naturaleza convivían razonablemente, lo que acabó al prohibirse los considerados excesivamente contaminantes.
Tarajes, zarzamoras y yerbajos de las orillas de los ríos, que tanto gustan a los ecolojetas, puede que sean las primeras víctimas de este movimiento insurreccional en ciernes. Los que quieren arrancarlos dicen que serán muy bonitos, pero que sus raíces y ramas estorban y frenan el curso.
Como en toda reacción popular de descontento, en la de los afectados por las inundaciones hay también radicales: exigen que se premie al que más contamine, que se defina el progreso como “la capacidad de transformar la naturaleza” y, desde luego, que se prohíba la exhibición de películas de Walt Disney.
Dicen que esas películas enajenan las mentes infantiles porque les hacen creer para el resto de sus vidas que los animalitos, en vez de servir para que las personas humanas se los coman con arroz, hablan y dicen tantas tonterías como las más humanas de las personas.