miércoles, 30 de mayo de 2012

LA MENTIRA,HERRAMIENTA IMPRESCIDIBLE PARA GOBERNAR

El Mariano Rajoy que el año pasado sentenciaba que los mercados desconfiaban de la solidez de la economía española porque el gobierno ocultaba la verdad, ¿es el mismo que este año impide que la verdad se descubra para que los mercados no aumenten su desconfianza? Son ambos la misma persona, pero las circunstancias de opiniones tan contradictoria sobre la utilidad de la verdad eran radicalmente distintas. El que dijo que la verdad fortalece aspiraba a ganar unas elecciones para poder gobernar y el que dijo que la verdad debilita ya había ganado las elecciones y estaba gobernando. Está claro que la mentira, por acción o por omisión, es una herramienta del que gobierna y que quien aspire a gobernar y prometa que dirá la verdad cuando gobierne, debe olvidarse de su promesa en cuanto consiga el poder. La gente, en contra de la falacia de que el ciudadano aspira a elegir democráticamente quien y cómo lo gobierne, lo que quiere es que le resuelvan sus problemas, sin agobiarlo con pormenores de su gravedad. Hay otra falacia, que completa e instrumenta la anterior: que el partido o persona con más respaldo electoral es la mejor para gobernar. Conclusión al menos prematura porque será el acierto o error de sus actos de gobierno el que determine si la elección fue acertada o errónea. Acusar de mentir al que gobierna y prometer que dirá siempre la verdad si lo eligen es un mecanismo infalible para que un gran número de ciudadanos predispuestos a que les mientan se dejen engañar. Mentir es una característica común a casi todos los presidentes de la llamada democracia española: solo Leopoldo Calvo Sotelo, el que menos tiempo ocupó la responsabilidad , se libra de de la acusación de haber mentido. Si hemos aprendido que mienten los gobernantes de izquierda tanto como los de derechas se debería: 1.-Determinar la importancia que la verdad y la mentira tienen en la opinión que a los ciudadanos les merezca un político. 2.-Prohibir la candidatura de los afiliados a cualquier partido político que haya tenido alguna responsabilidad de gobierno desde 1975, si creen que la verdad es condición necesaria para gobernar bien.. 3.-En las campañas electores de las formaciones que no puedan ser declaradas mentirosas porque todavía no hayan gobernado, se prohíbe la acusación de mentir y la promesa de decir la verdad como argumento político-electoral. 4.-Si algún candidato de partido no declarado mentiroso porque no haya gobernado, es electo y miente en el cargo, se prohibirá definitivamente a todo ciudadano español que pueda ser candidato a cargo político electivo en España. Como los españoles, por serlo, quedarían excluidos de gobernar España, se llegaría a la situación en que han desembocado 34 años de gobierno de políticos españoles electos por ciudadanos españoles: España y sus asuntos, como hace ya dos años que ocurre, pasarían oficialmente a ser responsabilidad de europeos no españoles.