A t A todos los del partido
socialista y a casi todos los del Popular que cobran salarios políticos parece
que se les nombra la bicha cuando oyen
hablar de la posible petición de rescate
de la economía.
Los dos partidos sumaron votos a favor de la reforma del artículo 135
para incluir la “estabilidad presupuestaria” en su enunciado, sin reparar en
que, salvo enajenación de territorio nacional, no hay mayor cesión de soberanía
que cambiar la Constitución
por presiones exteriores.
Si la soberanía nacional les trae sin cuidado, otros serán los motivos
por los que todos los socialistas y de izquierda unida y casi todos los del
partido popular temen a la intervención.
1.-Les asusta que, como contrapartida a la ayuda económica, los
extranjeros exijan podar los gastos innecesarios en las Administraciones,
cesando a todos los que cobran salarios públicos por recomendación política.
El medio millón de clientes con
cargos y salarios de libre designación política se sobrepone a los funcionarios
que entraron en las administraciones por concurso.
2.-Temen los que se oponen a la intervención económica extranjera que
los votantes la interpreten como una declaración oficial de la incapacidad de
todos los políticos españoles para gestionar con eficacia los asuntos
nacionales.
La mayor preocupación de los ciudadanos que se ganan la vida sin que
los haya “colocado” algún político es que, como pretenden los parásitos de la
política, entre las condiciones del rescate se excluya la poda de los gastos en
todas las administraciones del Estado.