viernes, 7 de junio de 2013

OPACIDAD DE PARTIDOS, SINDICATOS Y PATRONAL



   Coincidieron en Lisboa los secretarios generales de Comisiones Obreras (Antonio Gutiérrez), UGT (Nicolás Redondo) y LAB (Rafael Diez Usabiaga) y, en la conferencia de prensa conjunta que concedieron, les propuso un periodista que revelaran el número de afliados de sus sindicatos.
--¿Quién es ese? preguntó Redondo visiblemente disgustado a su compañero de asiento, antes de afear al entrometido por qué no preguntaba el número de afiliados de los partidos políticos.
   Evidentemente, ni Redondo ni sus supuestos rivales sindicales contestaron a la pregunta del ingenio periodista que suscribe.
   Por eso, si ni siquiera revelan el número de afiliados cotizantes (si es que tienen alguno),¿cómo van a informar de buena gana en qué se gastan el dinero que manejan?
   Si los gobiernos españoles se decidieran a dejar de ser cómplices de las organizaciones sindicales y patronales, darían por buenas las objeciones de sus representantes  a someterse a la ley de transparencia.
     Nunca debería el Estado haber contribuido con fondos públicos al desmadre  de las cuevas de Alí Babá que son sindicatos, organizaciones patronales y partidos políticos, si se hubieran financiado exclusivamente con las cuotas de sus asociados o afiliados.
    Así, los sindicatos dejarían de proclamar que representan a la clase obrera para ceñirse a la representación de sus cotizantes y otro tanto harían los partidos y las organizaciones patronales.
    No hay nada más chusco que ver hombro con hombro  y como socios a los mandamases de comisiones y ugt que, de hecho, deberían comportarse como competidores y rivales, ya que ambos compiten por un mismo mercado, los trabajadores.