domingo, 20 de julio de 2014

A VUELTAS CON ESPAÑA


A VUELTAS CON ESPAÑA
Desde que se extinguió la Dictadura, los españoles hablan cada vez más de democracia. Ahora se ha puesto de moda hablar de federalismo, sin saber que la forma en que el estado está (des)organizado es una federación, excepto en el nombre, que cambiaron por régimen de autonomías para no asustar a los unionistas que, salvo durante el afortunadamente breve y jaranero período de la primera república, rige desde que el primer Borbón español lo impuso en 1714.
   Por lo que les oigo decir a los partidarios del federalismo, lo que realmente piden para (des)organizar la administración es un sistema confederal, que consiste en que las leyes de cada estado federado tienen primacía sobre las de la administración del conjunto. Si no sabemos de lo que hablamos, y además lo explicamos mal, el acuerdo que se alcance, si se alcanza, nacerá muerto.
   Y otra cosa: Esta España nuestra es única porque durante toda la historia ha ido contracorriente del cauce por el que discurría el resto del mundo. Ahora que la Unión Europea,el organismo supranacional al que España pertenece, concentra las deciones  para su gestión, España suspira por hacer todo lo contrario.
   Que Dios proteja a España de los españoles, quitándoles la posibilidad de dirigirla y adjudicando su gestión como protectorado a, por ejemplo, los Estados Unidos, Holanda, Suiza o, si no hay más remedio,acordando con Gran Bretaña ampliar el territorio de Gibraltar hasta, por lo menos, los Pirineos.
    Porque el único enemigo de España, está comprobado, somos los españoles.