miércoles, 16 de diciembre de 2015

LA PLURALIDAD DE EL PLURAL

Como la falsa moneda que va de mano en mano, va de ordenador en ordenador un leaflet, (lo digo en inglés porque su equivalente en español es folleto, palabra malsonante que a los de derechas nos provoca urticaria), que se apoda “El Plural”.
Pues bien, El Plural es tan singular que, para ver la vida del color del que le gustaría que fuera, la mira a través de un suplemento para las gafas que le permite contemplarla tan roja como un tomate en sazón.
“No se quedó corto Pedro Sánchez, cuando dijo lo que dijo respecto a la corrupción del Partido Popular. En efecto, el líder del PSOE dio nítidamente en el blanco al subrayar que el aún presidente del Gobierno de España sigue siendo una persona indecente”.(El Plural, 16-12-2015).
La equidistante pluralidad del panfleto quedó retratada. Podría haber reprochado a Sanchez que no le diera un sopapo a Rajoy, pero se mordió la lengua y no lo hizo.
Puede que fuera porque la ocasión no era la propicia.Había demasiados testigos como para acusar posteriormente a la víctima de ser el agresor.
Y es que a esta España pútrida, amenazada por el cainismo derechista,   hay que cambiarla.
El día ya inminente en que la libertad proletaria permita quitársela a los explotadores en el recato de un callejón oscuro, se van a enterar.
Y se enterarán de la pluralidad de métodos para hacerlo.