viernes, 10 de febrero de 2017

CONDENEMOS EL FRANQUISMO

Usted va y se encuentra con que la ciudad que le han encargado organizar para que se mitiguen , si no se resuelven los problemas de que se quejan sus ciudadanos de hoy, por lo menos no empeoren.
Como se da cuenta de que no es capaz de cumplir el encargo de los de ahora, nada mejor que resolver los supuestos problemas que padecían los ciudadanos de antes.
Pues eso es lo que ya han hecho media docena de ayuntamientos, entre ellos los  de Zaragoza, Pamplona, Vitoria, y el de Madrid no lo hará oficialmente, pero se comprometió a pagar los gastos para que la lucha no decaiga hasta que triunfe.
El franquismo que tanto molesta a los partidos rojos españoles de ahora terminó hace 40 años cuando se murió en la cama de un hospital su inventor Francisco Franco, sin que a sus gobiernos se hubiera opuesto ningún partido porque solo se atrevieron a sacar la gaita cuando se murió.
Puede que no sea un despropósito condenar el franquismo a toro pasado porque, como Franco ya no puede meter en la cárcel a los que protestan contra su régimen, su gesto pasará a la historia sin miedo a las consecuencias de su rechazo.
¿Y si, al condenar el franquismo ahora, desparecen de las calles de las ciudades los coches que hoy las abarrotan y antes no había, las basuras que ahora se amontonan las recogen como antes, y puedes andar por los callejones más oscuros a las horas más intempestivas sin que re cosan a puñaladas?
Pues no estaría mal pero el sistema para lograr que lo bueno del franquismo vuelva a España no es condenar el régimen de Franco, sino restablecerlo.
Lagarto, lagarto,,,