viernes, 21 de septiembre de 2018

LA GUERRA QUE NUNCA SE ACABA


 

 

 

“Defensa abre expediente a los cinco militares que firmaron un manifiesto a favor de Franco”, (Diario Publico, 21/9/18.

 

   De la que me he librado…estaba a punto de firmar una carta solidarizándome con Bertrand Du Guesclin, el que ayudo a su señor a que se cargara a su hermanastro para heredar el Reino de Castilla.

   Habría sido un borrón a mi brillante carrera militar, en la que alcancé la graduación de Cabo, en el Ejército Colonial Español (Regulares 2).

    ¿Que de lo de Du Guesclin han pasado ya varios siglos?

   Lo mismo da, que el parsimonioso transcurso del tiempo no aminora la gravedad de la ofensa cometida.

    Y la ofensa de Franco no fue cualquier cosa: nada menos que anunciar que, cautivo y desarmado el ejercito rojo, las tropas nacionales han alcanzado sus últimos objetivos miliares”.

   Y para mayor recochineo, cerró su parte con el escueto “la guerra ha terminado”.

    Y ahí se equivocó porque para poner fin a un pleito, las dos partes discrepantes deben aceptar que lo que se daba se ha acabado.