Hay dudas con
las que el hombre nace, y que se muere sin haber resuelto.
Por ejemplo:
¿esos invasores de la política española tan cuidadosamente desaliñados de
Podemos, ¿son de izquierdas, de derechas, de izquierdas en tránsito hacia la
derecha o de derechas camino de la acracia, el destino manifiesto de las derechas?
Gracias a un
vídeo que hoy he visto en Periodista Digital he podido vislumbrar lo que esos
de Podemos se traen entre manos como sistema organizativo del gobierno y, por
extensión, de la sociedad española.
Tentativamente
lo he bautizado como “Sistema de Concubinato Sucesivo” (SCS).
Y es que las
imágenes muestran a Pablo Iglesias e Irene Montero morreándose de manera
entusiasta en la mesa de un café, lo que el hace sospechar que el escenario sea
preludio de efusiones más apasionadas en la intimidad de una cámara.
Es decir que,
en el sentido literal de camaradas, Irene y Pablo lo son porque
compartirían cámara que es como antiguamente se denominaba al dormitorio.
¿Y qué?
Pues que llueve
sobre mojado y que la liaison actual no es la primera (ni puede que sea la
última) en la que Pablo Iglesias practica en privado relativo lo que después
calca como modelo público de su gestión política,
No se sabe si
antes con Tania y ahora con Irene habrá experimentado ese método privado antes
de trasladarlo a la praxis partidaria
pero hay que suponer que el que hace un cesto hace un ciento.
Así que, como
vanguardia del futuro que es, Podemos practica en su organización interna el
orden que extenderá a toda la sociedad cuando Podemos sea su guía y ejemplo.
Un mundo de
sodomitas y gomorritas similar al que el Implacable dios de la Biblia se dice
que puso fin tirándoles una bomba atómica.