martes, 14 de enero de 2020

LA ENVIDIA


En los ultimos siglos se viene hablando tanto del gobierno como en el conjunto de todos los siglos precedentes se habló de la felicidad.
 --  ¿Gobierno es, pues, sinónimo de felicidad?
--Para el que gobierne, muy al contrario. Para el que no, una desgracia.
   --Porque de la felicidad habla solamente el que carece de ella, ya que  es el estado de ánimo natural, y solo lo que altera lo natural merece que se le preste atención.
    --Y, ¿por qué hay felicidad y por qué se pierde?
   --Por la envidia, naturalmente, que es el mayor estímulo del progreso.
   Si no nos diera envidia del coche ultrasónico de nuestro enemigo no se venderían millones de coches ultrasónicos más, comprados todos ellos por envidiosos.
   --Para el comercio será beneficiosa la envidia, pero es corrosiva para el civismo y la concordia.
--Eso es un cuento como el del viejo que se alegraba porque otro más viejo todavía se comía las yerbas que a él no le habían apetecido.
--Debería haber aspirado, desde luego, a comerse un bocadillo de chorizo.
   --Si es que hay gente pa tó. Mira la que le están liando a Pedro Sanchez los que lo envidian porque hace lo que a ellos les gustaría haber hecho.