martes, 17 de octubre de 2017

EL RECURSO DEL CINTO

Malamente está el cachondeo que se traen los catalanes  con España desde hace demasiado tiempo.
Pero que le tomen el pelo al gobierno de los españoles, entre los que se encuentran también los catalanes, rebasa los límites de la reprimenda, penúltimo recurso antes del más convincente para restablecer el orden y el respeto.
El último, y de garantizada eficacia, es olvidarse de las palabras y pasar a los hechos.
Como hacían los padres de antes: se desabrochaban el cinto como argumento decisivo contra el hijo díscolo, que así entendía lo que hasta entonces le había convenido no comprender.
Y una vez empleada satisfactoriamente la correa, mejor tenerla siempre a mano.
Para el caso de que el recalcitrante reincidente vuelva a las andadas, que lo hará cada cuarenta años como ocurre desde aquel matrimonio entre la discreta castellana y el cantamañanas aragonés, que fue el que aportó como dote el desde entonces martirio español,