Despues de los para unos efímeros y para otros interminables
años de una dictadura feroz contra los que sacaran los pies del tiesto, a la
gente de aquel país les sobrevino la democracia.
--¿La democracia?
¿y eso qué es?
--Dijeron que una
cosa en la que mandarían los que hubieran obedecido y obedecerían
los que hasta entonces hubieran mandado.
Y como en España
siempre han mandado unos pocos sobre muchos, les pareció bien cambiar para que
en adelante fueran muchos los que les mandaran a unos pocos.
(Con el paso del
tiempo, el número de los que mandaban casi llegó a empatar con el de los que
obedecían).
--Callejon sin
salidas, pues.
Nada de eso, sino
que como el ingenio del hombre es interminable (e inextinguible, oiga, inextinguible),
hicieron lo que nadie hubiera esperado.
--No me diga que
fragmentaron el mando.
--Tal cual, y hasta
llegaron a convencer a la gente de que el que no currara tenía tanto derecho
como el que se volvía tísico de tanto trabajar.
--Y eso, ¿dónde es
para no ir?
--En España, un
sitio al que aunque te parezca mentira, iban cada año millones de extranjeros, llamados
turistas.
--No me extraña,
¿has visto las colas que se forman en los zoológicos para sacar entradas?