jueves, 12 de diciembre de 2019

LO DE CATALUÑA


Se les podrá acusar de ventajistas, pero no de embusteros.
   Como es inevitable me refiero a los políticos catalanes catalanistas, que hasta cuando hablan sonámbulos no dejan de hablar de trocear España para salirse de ella.
    Y no se les puede acusar de traición porque proclaman abiertamente que, como patriotas de su propia Patria, luchan contra la que sienten ajena.
   Ese es el intríngulis del enredo hispanocatalán que, como todos en los que los limpios ideales se sirven en costrosa vajilla enmohecida de restos podridos, tiene mal arreglo.
    Hay ocasiones en las que, si no inevitable, es irresistible la tentación de romper los platos.