martes, 5 de mayo de 2020

LA TETINA DEL BIBERON


     Por lo que uno intuye, ese estado de alarma de cuya prórroga tanto se habla, es más o menos un retroceso de España de medio siglo, hasta los plácidos y añorados tiempos de Franco.´
--¿Añorados?
--Y envidiados porque teníamos medio siglo menos que ahora, que tenemos 50 años más.
  -- Y eso del Estado de Alarma, ¿qué es?
--Pues una ingeniosa triquiñuela que el que manda ahora se ha inventado para intentar mandar siempre.
--Pues si lo que el que manda ahora lo que quiere es ser dictador, con la dictadura que tuvimos antes no nos fue a los españoles demasiado mal.
  -- Depende del Dictador. El de antes fue el general más joven de Europa y el que lo intenta ahora es un chisgarabís que ni siquiera parece lo que quiere ser.
--Pues él está convencido de que lo es.
--Y a los que les facilita el acceso a la tetina del biberón les parece la divina garza.
   --O eso le dan a entender para perpetuarse en el mamamen.

DON ESTANISLAO


«Señores, ya no aguanto más. Voy a serles franco: ¡estoy hasta los cojones de todos nosotros!».
   Y así puso fin al Consejo de Ministros, que se celebraba en el que era ministerio de Fomento en la Glorieta de Atocha.
  Hasta tiempo después nada se supo de Don Estanislao Figueras, último presidente de la primera república española.
   Asumieron que, para diluir su cabreo, se había ido a su acostumbrado paseo bajo los árboles del vecino Parque del Retiro.
   Ni había sido así.
   En lugar de haber torcido a la izquierda para llegar al parque, siguió al frente hasta entrar en la Estacion ferrocarrilera de Atoche.
   Lo siguiente que de don Estanislao se supo fue que se había ido al Paris de la Francia.
   ¿Y por qué los otros gobernantes de España no han hecho ni hacen lo que Don Estanislao hizo?
   --Porque Don Estanislao, aquel sencillo boticario de Figueras, era honrado.