martes, 16 de mayo de 2017

SORPRESA: SANCHEZ PEDIRA QUE DIMITA RAJOYresa




Aquí el que no comente lo del debate de los dos candidatos y una candidata socialistas a mandamases de su partido no es comentarista. Ni siquiera es humano, categoría que también engloba, aunque por los pelos, a los que se dedican a comentar lo que ignoran (ignoramos).
Servidor, que tiene más interés en ver cómo los indios y los vaqueros se matan, vio en un noticiero lo bastante como para poder enjuiciar todo el debate.
Se trataba de una frase de Pedro  Sánchez en la que anunciaba que, si lo hacían secretario general socialista, su primera medida sería exigir la dimisión de Rajoy.
Por esa ley de probabilidades que solo falla cuando no acierta, un observador distraído de la cosa pública en España puede pronosticar sin miedo a errar que esa exigencia que Sánchez viene repitiendo cuando era secretario general, cuando lo echaron del cargo y cuando lo recupere, si es que lo recupera, tendrá resultado idéntico.
Porque Rajoy, que aunque parezca tonto no lo es, sabe por experiencia que el mejor remedio contra el vicio de pedir es la virtud de no dar.
Soy tan reacio a dar consejos a otros como rebelde a aceptar los que otros me den sin habérselos solicitado.
Pero a Pedro Sánchez, del que admiro su empecinamiento en recaer en el error, le quiero advertir para que no se equivoque:
Si Mariano Rajoy hizo oidos sordos a sus reiteradas exigencias del pasado para que dimita, también lo hará en las que anuncia para un futuro improbable.
Así que, en el caso de que lo repongan en su cargo perdido, que no pierda el tiempo en el futuro como ya lo perdió en el pasado.
Porque el tiempo que los dioses dan al hombre con generosa prodigalidad se lo conceden para que no lo derroche en gilipolleces.