lunes, 21 de octubre de 2019

CALIDAD Y CANTIDAD


Lo han visto estos ojos a los que la bondad divina le permite todavía apreciar el brillante ropaje de las aves, la bruma en la que se funden tierra y cielo en el lejano horizonte, el rizo acompasado de las olas en el azul sin fin.
--¿Y qué han visto? ¿qué han visto?
Pues han visto, naturalmente a través de la televisión, cómo la policia de Barcelona persuadía a un motorista que circulaba legalmente por una calle a que diera la vuelta y se fuera con la música otra parte.
--Sus razones tendrían los agentes.
--Desde luego, que por la calzada, y en sentido contrario al del motorista, avanzaba una masa de manifestantes haciendo real su derecho democrático de manifestación.
--Pero los manifestantes tendrían autorización para expresar su derecho a la protesta ocupando la calzada por lo que, en ese caso, su derecho prevalecería sobre el del motorista.
--¿Qué derecho?
--El democrático derecho que sustenta la democracia: que siendo todos iguales, mientras más ciudadanos digan que de noche sale el sol, más brillará el sol a medianoche.
--“Llegaron los sarracenos/ y nos molieron a palos/que Dios ayuda a los malos/ cuando son más que los buenos”.
Las reglas de la democracia que tan gustosamente aceptó el motorista.