Se dice por
aquí que es “jartible” la situación tan
onerosa de aguantar como la del que está obligado a llevar en brazos a un niño
hasta que cumpla los 30 años.
Un suponer: lo
de Cataluña.
Si los
catalanes que se quieren ir se hubieran ido sin despedirse siquiera, y si el
gobierno que no quiere que se vayan hubiera discutido menos y actuado más, la
gente habría vuelto hace ya un rato a su distracción tradicional: discutir
sobre fútbol.
Y es que ésta
España de siempre es una España irreconocible desde la decadencia de la salud
de Franco, encarnación de la España eterna que actuaba sin discutir y sin
molestarse en justificar sus actos.
Falsa España es
ésta España de perros ladradores y nada mordedores.
¿Dónde se
esconde el futuro salvador de la España que se echó a la mar para llegar a
China y acabó descubriendo América?
Si al que los
dioses hayan encomendado la misión de salvar esta vez a España es patriota,
tiene vergüenza y lo que hay que tener, que no se esconda y dé la cara.
Si no lo hace
ya, cuando lo haga no va a encontrarse una España a la que salvar.