¿Se hizo la miel para
la boca del asno?¿Prefieren los cerdos comer hojas de nenúfares o remolacha
borriquera?
Esas preguntas de
complicada respuesta sirven de exordio a otra de casi imposible contestacion: ¿son
capaces los españoles de autogobernarse o hay que gobernarlos, si es a palos
mejor?
Y es que hasta los más liberales estudiosos del comportamiento humano admiten
la posibilidad de que la conducta de los españoles tenga más de alimañesca que
de angelical.
¿Cómo se explicaría, si no, que les resulte
más llevadero llegar a un apaño con los enemigos declarados de todos que con
los que solo parcialmente discrepen?
Pues pongan la lupa sobre lo que pasa ahora y prepárense para aguantar
el chaparrón que se nos viene encima, y sin paraguas que nos proteja:
Teóricamente al menos, casi todos los
españoles están de acuerdo (excepto parte de los vascos y los catalanes) en
aguantar juntos lo que se nos viene encima a todos.
¿No sería lo más razonable que vascos y
catalanes se juntaran para lograr su intento común de joder la marrana, y que
la marrana (que son los demás españoles menos catalanes y vascos) se juntaran
para no dejarse joder?
Pues no señor. Después se quejan de que, de vez en cuando, tenga que
llegar por aquí alguien que les diga que se acabó el cachondeo.
