De ésta España
que me tiene por huésped solo espero que dure lo que mi estancia dure.
Una vez saldada
la cuenta en caja y retiradas mis maletas en una carretilla, que derriben la
fonda, la remocen o la reconviertan en lupanar.
¿Discreto y
otoñal o bullanguero y ruidoso?
Da lo mismo
porque el carácter de esa clase de establecimientos lo marca el padrote o la
madama que lo regente, que atempera los celos entre internas y selecciona con
discreción los tete a tete.
¿¿¿Mande???
--Los
encuentros privados, aquellos en que el sudor se interpone y une a diferentes.
Si se
explicara…
--Pues mire
usted que los franceses, en esas cosas, son los que hablan con más desvergüenza
y se las apañan divinamente para poner de acuerdo a dos que estén deseando
ponerse de acuerdo.
--¿Y para
evitar que se pongan de acuerdo dos que a ellos no les convenga que se pongan
de acuerdo?
--Eso lo bordan.
Fue para eso para lo que inventaron el bastidor.
--By the way (a
propósito, que dicen los ingleses…)
“…anda por aquí
uno que fue segundón del que manda en Francia y que, hay quien sospecha, su
antiguo señorito lo ha destinado a España para una misión sencilla: echar a
pelear a los españoles que quieran mandar, para que alguno de ellos acabe
pidiendo ayuda a los franceses”.
--Como lo de
aquel Carlos IV que mataba venados mientras su achichincle lo venadeaba con su
mujer, y su niño los ponia a parir a todos.
--¿Y qué pasó?
--.Pues que un
tan napoleón que mandaba en Francia mandó a unos mamelucos a España para que
pusieran orden y se quedaran con el país, una vez ya ordenado.
Como ahora, el
que manda en Francia ha destinado a España a un tal Manuel Valls, al que empleó
en tiempos como primer ministro, para que malmeta unos con otros a todos los
españoles y acaben pidiendo a los franceses que vengan a sacarlos del lío en el
que los han metido.
--Coño, pues
que se den prisa y vengan en cuanto se alejen las calores, que en verano
estamos todos de vacaciones…
No hay comentarios:
Publicar un comentario