domingo, 14 de octubre de 2012

LA CONMOCION WERT

     Los políticos españoles son una masonería cuyos distintos ritos, conocidos por partidos, simulan una rivalidad implacable en el reparto de los beneficios del poder.


Que esa discrepancia es puro teatro lo confirma el frente común que forman para oponerse a una posible ayuda extranjera a la economía, porque el “rescate” podría estar condicionado a podar la maraña de administraciones y asalariados que han urdido para colocar a sus partidarios.

También se quitan la careta los falsos adversarios al unirse contra toda iniciativa de crear un partido político nuevo, que aspire a meter cuchara en el festín del poder.

Todos los partidos políticos coinciden al proclamarse asociaciones de individuos impulsados por su vocación de servicio público que proponen resolver los problemas del Estado aplicando la ideología de sus partidos.

La masonería se define como asociación “discreta, progresista, filantrópica y cimentada en la fraternidad” pero en realidad es una trama de apoyo mutuo de sus miembros.

La rivalidad simulada y la complicidad tácita de los partidos políticos españoles saltó por los aires hace unos días porque José Ignacio Wert dijo en el Congreso de los Diputados que, como ministro de educación del gobierno de España, españolizaría a los alumnos de la región española de Cataluña, desde hace años sometidos a un intenso programa político de desespañolización.

Es tan obvio que el ministro español de educación cobra su sueldo por españolizar a los alumnos de una región española que el escándalo de sus llamados adversarios políticos huele a chamusquina.

Como, en palabras del guerrillero Che Guevara, “la obligación de un revolucionario es hacer la revolución”, la de un ministro de educación del gobierno de España es españolizar a los educandos.

Personas mayores, serias y que cobran por su buen sentido en la administración pública no es lógico que se extrañen del propósito de Wert.

¿Por qué, entonces, los ha escandalizado?

Porque estaban acostumbrados a las peregrinas soluciones que los ministros anteriores proponían para resolver los problemas de sus departamentos.

Ejemplos:

1.-Un reciente ministro de Industria solucionó los problemas del sector regalando bombillas de bajo consumo.

2.-Una ministra de Igualdad (¿por qué no habría también ministros de libertad y de fraternidad?) mostró tarjetas rojas a los maltratadores de mujeres para que, avergonzados, dejaran de ser malos.

Para comprobar si la propuesta de Wert es razonable,debería complementarse con la de españolizar a los niños valencianos, baleares, asturianos, gallegos, andaluces y vascos.

Puede que produjera una enajenación identitaria general, pero estimularía los estudios de psicología y psiquiatría. Algo es algo.

martes, 9 de octubre de 2012

OPERACION.. SALVAR ESPAÑA

      Suele ponerse como ejemplo de audaces a Aníbal, Hernán Cortés, Francisco Pizarro y Otto Skorzeny.


Todos ellos, y otros cuantos millones de aventureros que lograron lo que parecía imposible, no fueron más que apocados burgueses si se les compara con los intrépidos insensatos que, en la acogedora soledad de nuestra casa, aconsejamos cómo solucionar los problemas del mundo.

Los que pasan por aventureros sin miedo necesitaron arcabuces, espadas y barcos para sus hazañas. A nosotros nos basta un ordenador.

Vamos a ello: si a mí me proclamaran emperador de España (no acepto ningún cargo para el que me elijan los que son todavía más tontos que yo), garantizo que:

1.- Ahuyentaría a la jauría de hienas que, disfrazados de políticos, se disputan los restos de España.

2,-Que, después de salvada España, haría  lo mismo que hizo Cincinato después de salvar Roma de los ecuos: volvió a arar con sus bueyes. Yo volvería a escribir idioteces en mi ordenador.

Mi plan de salvación de España es simple

a) Prohibiría que el Estado o cualquiera de sus organismos compita con empresas privadas en ningún sector de la economía.

b) Para que no me llamen radical, fijaría un tope máximo salarial diez veces superior a la media  para todos los cargos electos.

c) El político podrá hacer lo que quiera con esa asignación, con la que tendrá que pagar los asesores, secretarias, peluqueras, chóferes y aduladores que necesite.

d) Es evidente que no vale, como pasa ahora, colocar a esos apesebrados para que los pague el Estado.

e) La separación entre empresas estatales y privadas sería tan radical que la escuela pública cedería ante la privada, la sanidad pública ante la privada, el orden público se adjudicará por contrato a la mejor oferta de empresas de seguridad y al concurso para la concesión de la tarea de defender a España de amenazas extranjeras podrán concursar todas las compañías de mercenarios que quieran, nacionales o extranjeras.

Declaro resueltos todos los problemas de España y, como había prometido, vuelvo a mi ordenador a escribir idioteces, que es para lo que, de verdad, sirvo.

lunes, 8 de octubre de 2012

LA INÚTIL SABIDURÍA

         
  



Dicen que la sabiduría, aunque sea una habilidad conseguida mediante  la aplicación de la inteligencia a la experiencia, no tiene por qué tener aplicación práctica.

Hablando claro: que la sabiduría ni sirve para ganar dinero ni el que más dinero tenga es el más sabio por lo que, en tiempos de Horacio o de Fray Luis de León, tener entre las amistades un sabio quedaría muy bien, pero hoy sería como tener un tío en Graná.

Imagínense que alguien tuviera un familiar sabio y presumiera de eso entre sus conocidos.

-Ganará una millonada, envidiaría uno
--Será, por lo menos, diputado, aventuraría otro.
--La Junta le dará una buena paga, supondría el guardia interino municipal.

Pero todos estarían equivocados porque un sabio de verdad, hoy en dia, no sirve para nada.

Ni los discípulos de dos teóricos de la sabiduría conceptual, como los antiguos, y además poetas Horacio y Fray Luis de León ganarían nada siguiendo sus enseñanzas.

Si sobreviviera todavía un admirador del viejo Horacio, que siguiera como norma de conducta las enseñanzas del poeta latino, ¿qué haría si la necesidad lo acuciara a enviar curriculos  para encontrar empleo?

Como todo el que, en estos tiempos, sigue ese método de buscar ocupación pagada fracasaría, sobre todo si entre sus virtudes destacara la “dorada mediocridad” que el poeta recomendaba.

¿Y qué resultado le daría a un discípulo de Fray Luis de Leon que,én el apartado  “pretensiones” de solicitud de empleo escribiera, y además en verso:

A LA SOMBRA TENDIDO
DE YEDRA Y LAURO ETERNO CORONADO
PUESTO EL ATENTO OIDO
AL SON DULCE, ACORDADO,
DEL PLECTRO SABIAMENTE MENEADO.

Lo más probable es que ni se molestaran en contestar a ninguno de los dos y, si acaso, al primero le dirían que los jefes ya disfrutaban de sobras de un envidiable y “dorada mediocridad”.

Al otro le dirían que se fuera con la música a otra parte y que, con la púa que llama plectro, rasque sus cuerdas vocales y no las cuerdas de la vihuela.

En conclusión, que en este mundo grosero y materialista que nos ha tocado, sabios son los que halagan y sirven a un político prometedor para que, en su momento, le pague con un lugar en el pesebre público, bien provisto de cebada.


      

viernes, 5 de octubre de 2012

A LA CAPACIDAD DE SOBORNAR LLAMAN PODER

                    Es este el relato de un acontecimiento que se encuadra en la ruda simplicidad geórgica del que suda en las tareas agrícolas, y no  en las evanescentes ensoñaciones bucólicas del pastor que, mientras hacer sonar el caramillo, imagina en las nubes el rostro de la amada.
El protagonista es un chico avispado que llegó a personero (director, gerente o algo así) de la emisora en Linares de la cadena SER.
Desde esa estación de radio ayudó al gobierno socialista a convencer a los trabajadores de Santana que iban a ser despedidos por cierre de la empresa de automoción, de que eran de fiar las promesas de los políticos de buscarles nuevos empleos y compensaciones.
Tan agradecido quedó Gaspar Zarrías, secretario de estado de cooperación territorial de  Zapatero durante el conflicto de Santana, cacique socialista de Jaén y perejil para todas las salsas desde que el 27 de Mayo de 1978 los socialistas iniciaron su régimen en Andalucía.
El muchacho al que Zarrías estaba agradecido por la ayuda en el conflicto de Linares, pidió y obtuvo la concesión para la explotación de varias emisoras de radio, una de ellas en Palma del Río, su pueblo, naturalmente cedida a la cadena SER y que fiel a los intereses que defienden todas las estaciones de la red, también se inclina por todo el izquierdismo de diseño.
El concesionario, que con el tiempo sufrió la epidemia de las prejubilaciones y los despidos, regresó a su tierra, sin nada en que emplear su tiempo y su talento.
Comenzó a flirtear, o difundió que estaba flirteando con la COPE, la bicha para los izquierdosos, para cederles la explotación de su emisora local.
La infidelidad que tramaba el concesionario de la emisora llegó a oídos del alcalde, que entendió el mensaje y se apresuró a conjurar  la amenaza.
Le iba en ello que una emisora que hablaba por su boca, pasara a hablar por boca de su contrincante político.
El audaz personero de la SER en Linares debe ser un hombre al que la dura banca de la vida le ha enseñado más que los ilustrados bancos de una facultad universitaria porque, poniendo una vez más la ideología al servicio de sus intereses, llegó a un acuerdo con el alcalde:
A cambio de un salario de 48.000 euros anuales, aceptó el nombramiento de director del plan estratégico municipal, y dejó en las manos amigas y benefactoras la emisora municipal de radio.
Hay quien se extraña de que ese cargo que requiere habilidades técnicas, empresariales, de gestión, de estudio de mercados y población  largo plazo, de las tendencias futuras de la tecnología y de los bienes de consumo haya recaído en alguien que carece de ellas, de la capacidad de predecir las salidas de la actual crisis y el escenario posterior de los mercados.
Los que se extrañan son los ingenuos que creen que un político procura desde su puesto actuar en bien de todos y que el poder es la capacidad de procurar el bien general.
Ya aprenderán, aunque será demasiado tarde, que el poder es la capacidad de sobornar.

jueves, 4 de octubre de 2012

LA CONSPIRACION DE ROMNEY

 Que alguien con más imaginación que un ladrillo ponga en marcha su fantasía y conteste qué haría un individuo al que sorprendieran robando:


1-Se excusaría alegando que todos roban.

2.-Movilizaría a todos sus familiares y amigos para que declaren

que es honrado.

3.-Reconocería que cayó en la tentación de robar y volvería a la senda de la honradez.

El ejemplo anterior es un suponer, una metáfora, un símil para que personas sencillas y sin ringorrango se percaten de lo que dijo Mitt Romney, candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, y de cómo reaccionaron los españoles.
   Todos coincidieron en las dos primeras posibilidades y todos, también, descartaron la tercera.
“España destina el 42 por ciento de lo que produce a gastos del estado. Yo no quiero que Estados Unidos siga ese camino”, había dicho Romney en el debate de Denver con el candidato demócrata, el presidente Barack Obama.

Ni uno de los veinte millones de españoles que opinan diariamente en emisoras de radio o estaciones de televisión se ha privado de criticar a Romney.

Pero ninguno ha desmentido el dato aportado por el candidato republicano a la presidencia nde Estados Unidos, a pesar de su manifiesta falsedad: las administraciones públicas españolas derrochan el 43,6 por ciento del PIB, el valor de los bienes y servicios que España produce al año.

Así que, a la vista de este último ejemplo, queda claro cómo reacciona tradicionalmente el español frente a las alusiones que de fuera hacen a algunas peculiaridades españolas.

Como de costumbre, se culpa a eficaces conspiraciones judeomasónicas y a imposibles alianzas entre comunistas, anarquistas y liberales de tramar insidias contra España.

En el caso de Romney, todos coincidían en que, para contrarrestar la denuncia de que el Estado gasta demasiado, nada mejor que aumentar el derroche:

Proponen que el gobierno de Madrid contrate empresas internacionales de relaciones públicas y financie un lobby en Estados Unidos para sembrar ideas positivas sobre España y equilibrar así la impresión negativa que inspiró el candidato republicano.
 Es la spanish way of life, la manera de vivir de los españoles: culpar a otros de nuestras culpas.

martes, 2 de octubre de 2012

LA JUNTA GASTA FUERA LO QUE ANDALUCIA NECESITA

Cavilaciones obsesivas sobre las razones que han movido a la Junta de Andalucía a pagar 620.000 euros por el estudio de un río del norte de Marruecos desembocaron en una inevitable confusión.
El río es el Lukus, que cien kilómetros después de nacer en El Rif, desemboca en el Atlántico por Larache.
Las razones del gobierno de José Antonio Griñán para financiar el estudio del río marroquí han podido ser:
1.-Que a la Junta de Andalucía le sobre dinero porque ha resuelto ya todos los problemas de Andalucía y los andaluces.
2.-Que, con la inversión en Larache, maquina ganarse la voluntad de los marroquíes de aquella zona, para facilitar su anexión.
3.-Que la inversión la haya planeado algún influyente funcionario de la Junta con debilidades de sibarita y afición desmedida a las angulas, abundantes en los meandros del Lukus.
Como ninguna de esas razones pueden aducirse con seriedad para justificar el dispendio, habrá que buscar otras más plausibles.
1.-Marruecos es el país más cercano a España y en el que la permisividad de sus autoridades hacia la corrupción, el soborno y el fraude supera a la de las autoridades españolas.
2.-Que, si fraudes como los de los ERE tardó años en aflorarlos la prensa española, la amordazada prensa marroquí no se atreverá nunca a hurgar en los tejemanejes del Lukus.
3.-Que no se puede comparar el glamour y el lujo que habrán disfrutado gratis los técnicos y funcionarios de la Junta para estudiar, discutir, evaluar, recomendar y aprobar el proyecto del Lukus, con el escueto almuerzo en un bar de pueblo si, por ejemplo, hubieran ido a Palma del Río a aprobar la solución a un problema similar al de Larache.
Cada año, con precisión cronométrica, el Genil se desborda e inunda poblaciones como Ecija o Palma del Río, donde desemboca más de 300 kilómetros después de su nacimiento, en Sierra Nevada.
El desbordamiento lo provoca el rebalse de las aguas del Genil en el medio arco de su curso alrededor de Palma del Río, cuando lluvias en el nacimiento del Guadalquivir, en Cazorla, hinchan su cauce.
Solucionar el problema periódico del desbordamiento del Genil cuesta 300.000 euros. Una miseria al lado de los 620.000 de solo el estudio para resolver el problema del Lukus marroquí.
Los políticos y burócratas de la Junta de Andalucía prefieren proyectos caros a los baratos porque, naturalmente, al manejar más euros, más calderilla se les queda entre las manos.

domingo, 30 de septiembre de 2012

DEMOCRACIA ESPAÑOLA, TAN PERFECTA COMO LA DE ROMA

La democracia española, que sobrevino hace 34 años como desenlace de una larga dictadura, se ha perfeccionado hasta poderse equiparar en eficacia a la provechosa relación entre poderosos y desvalidos que, en el Imperio Romano, se conocía por clientelismo.


En esta organización de la sociedad democrática de España es el ciudadano el que debe servir al Estado y no el Estado al ciudadano, como debería ocurrir en sociedades idealmente libres y democráticas.

España ha evolucionado hacia la democracia nominal que es, y no hacia la democracia real que debería haber sido.

En la España actual, el individuo no puede prosperar contra ni al margen de las normas del Estado, que se encargan de interpretar y hacer cumplir los burócratas que administran el Estado.

Se alcanza el poder que en España otorga beneficiarse de su ejercicio mediante la victoria en elecciones a cargos políticoselectos, para los que es precisa la designación del candidato por las burocracias de los partidos.

El poder real en España lo ejercen las personas que controlan la burocracia de los partidos desde el nivel local al nacional y los que, designados por esos burócratas para cargos oficiales electos, acceden a ellos gracias a la maquinaria de movilización de votantes que maneja y pone a su servicio lla burocracia del partido.

Se asciende en la maquinaria de la organización partidaria demostrando que el aspirante controla la voluntad electoral del suficiente número de votantes como para asegurar la elección del candidato del partido frente a  otros contendientes..

Los votantes comprometidos a votar a un aspirante son los clientes del candidato, que los consiguió gracias a favores personales,  o por abogar en su favor ante correligionarios de su partido.

La relación de clientelismo, formalmente no reconocida en el juego político, no es incondicional ni permanente. El cliente puede cambiar de patrón en cuanto otro le ofrezca más beneficios.

Lo qaue une a  cliente y patrón, se consideraría contraria a la pureza electoral si el segundo de ellos la admitiera porque rompería el principio de neutralidad del político frente a sus posibles electores y el de la liberta de eleccion por parte del primero..

A falta del reconocimiento oficial de la práctica de esa anomalía democrática, solo se puede dar fé de su implantación por los resultados de su ejercicio.

Las pruebas están a la vista hasta de los miopes.