Hasta ahora eran los partidos políticos el cauce por el que la voluntad
popular discurría hasta hacer llegar y distribuir en la sociedad el beneficio del
esfuerzo concertado.
Hasta ahora.
A partir de ahora, y si triunfa el nuevo modo organizativo que se está
experimentando en Barcelona, serán las minorías más audaces y violentas las que
dicten a las mayorías los términos de su obediencia.
La nueva forma de relacion entre líderes que dirijan y masa que
obedezca es una variante más de las innumerables que a lo largo de la historia han
regulado las relaciones humanas.
Siempre mandaron los más fuertes e inteligentes y siempre obedecieron
los más apocados y menos emprendedores.
Como, según la leyenda bíblica, pasó con los primeros humanos sobre la
tierra:
El irritado y amargado Cain mató al satisfecho y beatífico Abel.
Siempre ganan los malos, los que por no tener lo que otros tienen matan
a los buenos, que tienen lo que ellos envidian.
¿Y qué es la envidia sino el más eficaz combustible para la máquina del
progreso?
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